“No reconoce ni a su madre cuando quiere droga”, comentó el padre del joven que solamente pretendía “asustar” a partir de sus reincidencias.
La desesperación de un padre que no sabe cómo encarrilar a su hijo adicto a las drogas llevó al hombre a dispararle luego de que éste se presentara “alterado” e ingresara a la casa donde viven derrumbando la puerta a patadas.
El trágico episodio ocurrió el último jueves a las 16.30, en Barrio Belgrano, al oeste de Rosario, Santa Fe, cuando el hombre tomó una escopeta y efectuó una serie de disparos para “asustar” a su hijo, y terminó hiriéndolo en los pies.
Pablo, el padre del joven, quedó detenido y ahora afronta una causa. El hombre trabaja en un taller cercano a su domicilio y comentó que el día del episodio, al divisar el estado de su hijo, llamó en un primer momento al 911, pero luego decidió tomar cartas en el asunto para “calmar” a Jeremías, su hijo, que buscaba dinero para comprar droga, pero la situación se le fue de las manos.
El muchacho en cuestión es el menor de tres hermanos y Jeremías comenzó a consumir estupefacientes en 2015. Desde entonces fue internado en cinco oportunidades pero nunca logró recuperarse y aseguran que cuando quiere consumir “se pone violento”.
“Cuando está en ese estado es irreconocible”, lamentó Pablo que comentó que su hijo “es un chico muy solidario y habilidoso” cuando está sobrio.
“Le pegué, llamé de nuevo a la policía”, relató el hombre que luego decidió tomar la vieja escopeta de su padre para “asustar” a su hijo. Sin embargo, la maniobra se descontroló y uno de los perdigones lo lastimó en el pie. En ese momento tuvo que llamar nuevamente a la policía y pidió por una ambulancia.
“El chico no reconoce ni padre ni madre. Cuando quiere consumir, quiere consumir; no importa de qué manera sea y el Estado eso lo sabe, pero no están capacitados para contenerlos”, y pidió auxilio al Estado: “Todavía no es tarde para que ayuden”.
RadioMitre.