Por disposición del juez de la causa, Adrián González Charvay, durante el procedimiento se pudo secuestrar un avioneta Cessna relacionado con la causa y se allanó el lubricentro del sospechoso.
El empresario chaqueño detenido, identificado como Alberto Javier Busciglio de 56 años, fue trasladado desde Resistencia a la ciudad de Campana, provincia de Buenos Aires donde tendrá que declarar ante el juez federal Adrián González Charvay. Está acusado de ocultar casi dos toneladas de cocaína en bobinas de acero y bolsas con piedras preciosas en la localidad de Bahía Blanca y la provincia de Mendoza. Además, se lo vincula con la adquisición de piezas de aleación de hierro para evitar la detección de la droga.
El Ministerio de Seguridad de la Nación, junto a otras autoridades federales, confirmaron el secuestro de una avioneta perteneciente a Busciglio y se rodeó un lubricentro en su propiedad.
Estos allanamientos fueron llevados a cabo en plena madrugada, cuando efectivos de la Policía Federal, tanto de Resistencia y de Barranqueras, fueron avalados por el juez Charvay, quien ordenó la detención de Busciglio junto a otros 16 sospechosos, de los cuatro son de nacionalidad mexicana y residen en el estado de Michoacán.
Testaferro de la organización
Según la cartera de Seguridad, el empresario «está sindicado como el testaferro de la organización y encargado de adquirir las bobinas de acero especialmente fabricadas para que los scanners no detecten la droga». «Además, es dueño de un lubricentro en Resistencia, local que fue debidamente allanado al momento del megaoperativo desplegado por la Policía Federal», precisó el comunicado oficial publicado por la agencia Telam.
De acuerdo a los voceros, el imputado es titular de una empresa que se dedica a la reparación de escapes de autos, cambios de aceite y filtro, y a la colocación de jaulas, defensas y enganches para vehículos.
«El hecho de haber incautado la droga no significa que la investigación se agote, todo lo contrario: fue el puntapié para seguir adelante hasta dar con todos y cada uno de los responsables. Queremos, además, desfinanciar a estas bandas y quitarle los bienes que obtuvieron como producto del narcotráfico», indicó la ministra Bullrich.
Traslado a Campana
Por su parte, el juez González Charvay, comunicó a la prensa que durante el procedimiento existe la posibilidad de que «tras el armado de las bobinas con la droga los mexicanos podrían haberse ido del país». «Nos exponíamos a la alternativa de asegurar el secuestro (de la cocaína) un poco más adelante pero perder la captura de las personas con más responsabilidad de las maniobras», contó el magistrado.
Según el magistrado, fue «en los primeros días de marzo» cuando la Policía Federal recibió «información muy concreta de varias empresas vinculas al comercio exterior, concretamente relacionadas con el rubro del acero, que estaban por utilizar este tipo de emprendimientos legítimos para el contrabando de estupefacientes hacia Europa y concretamente a Barcelona como un destino posible».
«señalaban que el puerto de Campana sería el lugar elegido por este grupo para desplegar la actividad» aunque, aclaró, que «este tipo de delitos complejos no se realizan usualmente en un único espacio territorial, generalmente se despliega en múltiples jurisdicciones», explicó Charvay.
Los rollos de acero en los que se ocultó la cocaína en Bahía Blanca, se llevó a cabo en el parque industrial de esas ciudad. En ese orden, el juez detalló que en el depósito allanado en ese parque, habían 17 rollos en donde la droga estaba depositada en ocho de ellos.
Consultado sobre la cocaína, el funcionario judicial señaló que restan «realizar estudios para determinar su calidad, pureza, concentración y el origen» de la misma.
Por último, el juez indicó que a partir de mañana serán indagados en los tribunales federales de Campana los 17 detenidos que hay en la causa. El operativo antidrogas fue denominado «B. B. de Acero» porque una tonelada y media de cocaína fue hallada dentro de las bobinas secuestradas en Bahía Blanca, mientras que a los otros casi 500 kilos los descubrieron en un cargamento de piedras preciosas la ciudad mendocina de Luján de Cuyo.
Fuente: Télam