El presidente del Centro de Empresas Constructoras del Chaco brindó declaraciones a TN24.com.ar sobre la actualidad del sector. Dijo que hay proyectos de viviendas listos para comenzar, pero que las lluvias de los últimos meses imposibilitaron el trabajo.
Consultado por este medio, Andreatta reveló que la situación mejoró a comparación del año pasado ya que hay compromisos de obras en toda la provincia. Se refirió particularmente a lo que tiene que ver con la construcción de viviendas, algo que se venía reclamando activamente durante todo el 2016.
Andreatta comenzó aclarando que «el Chaco está en el puesto 21 a nivel nacional, pero hace aproximadamente un mes se definió la reactivación, mediante el Instituto de Viviendas y la Unidad Ejecutora dependiente de la Secretaría General de la Gobernación, de obras destinadas a unidades habitacionales. Se trata de viviendas que fueron paralizadas tras el cambio de gobierno», explicó.
Asimismo afirmó que, si bien fueron pocos, ya se registraron movimientos de dinero para que se comience a trabajar. «Pero acá surge otro tema, y es que en el Chaco no paró de llover en los últimos meses. Las condiciones, desde lo climático, son extremas y no nos permiten trabajar como se debe», detalló.
En ese sentido, Andreatta anunció que «esta semana recién se pudo reactivar de manera sostenida el trabajo, gracias a los días de sol, porque hasta hace poco no se podía realizar nada en algunas zonas desde abril».
También aclaró lo siguiente: «las obras generalmente están en lugares donde hay accesos de tierra, y tampoco podemos entrar a deteriorar la zona. La maquinaria es pesada y muchas veces terminan rompiéndose las calles, entonces no podemos afectar tampoco a la gente que vive allí. Hay todo un transfondo social que también se suma a la situación».
«Nosotros entendemos que las obras públicas son importantes, las viviendas son importantes, pero tampoco podemos poner eso por encima de la gente y arriesgar a que esas personas se queden sin poder ingresar a su barrio o salir del mismo por inconvenientes que se puedan generar al circular las máquinas», sentenció Andreatta.
