Corrientes: Colombi participó del 177° aniversario de la coronación pontifica de la Virgen de Itatí

Corrientes

El gobernador Ricardo Colombi participó ayer de la conmemoración del 117º aniversario de la Coronación Pontificia de Nuestra Señora de Itatí. El mandatario llegó a la Basilica acompañado por su esposa, Estela Barattini, y se unió a la tradicional procesión alrededor de la plaza principal del pueblo, en un mediodía frío junto a la multitud que llegó hasta allí para ofrendarle su amor, fe y devoción a la virgen morena.

Posteriormente concurrió a la Solemne misa en el altar instalado frente a la Basilica, oficiada por el arzobispo de la Arquidiócesis de Corrientes, monseñor Andrés Stanovnik. El día nublado y frío no fue impedimento para que el pueblo correntino y miles de visitantes que arribaron desde distintas provincias y países limítrofes, manifestaran su fe y devoción mariana a la Virgen de Itatí.

Como es habitual se produjo el encuentro de las imágenes de las vírgenes de Itatí y Caá Cupé, notándose la presencia de una nutrida concurrencia de hermanos de la vecina república del Paraguay, unidos por la fe con sus pares correntinos y de distintos puntos del país que llegaron para asociarse a los festejos mariano.

Antes de la homilía, micrófono en mano, el arzobispo saludó al gobernador Colombi, a las autoridades provinciales, locales, fuerzas de seguridad, sacerdotes, diáconos, seminaristas, de una manera especial a los hermanos paraguayos que han venido con la queridísima madre y virgen de Caá Cupé, y a todos los presentes. Lo hizo antes de recordar recordó los sucesos registrados hace más de doscientos años atrás en el denominado atajo viejo cuando la virgen apareció e impidió que una horda de individuos que azolaba la zona intentó invadir el pueblo y se abrió la tierra. Los atacantes, sorprendidos desistieron y se alejaron ante un suceso que más tarde se dijo que fue un milagro de la virgen morena.

Durante la homilía pronunciada en la misa central efectuada pasado el mediodía, concelebrada por sacerdotes de toda la región, monseñor Andrés Stanovnik dijo que a pesar de que varios estaban tiritando por fuera, pero con el calor del amor y la fe por dentro estamos felices por el solo hecho de encontrarnos frente a ella. “Ella nos mira con una mirada llena de misericordia. Cuando nos sentimos mirado por ella, su mirada descongela nuestras frialdades y ablanda la dureza de nuestros corazones. Nos llena de paz, de consuelo y de Fortaleza para enfrentar las dificultades de la vida y nos sostiene para no ceder ante el desaliento y ante la seducción de tomar el camino fácil”.

Antes de presidir la solemne misa, el arzobispo saludó al gobernador Colombi, a las autoridades provinciales, locales, fuerzas de seguridad, sacerdotes, diáconos, seminaristas, de una manera especial a los hermanos paraguayos que han venido con la queridísima madre y virgen de Caá Cupé, y a todos los presentes. Lo hizo antes de recordar recordó los sucesos registrados hace más de doscientos años atrás en el denominado atajo viejo cuando la virgen apareció e impidió que una horda de individuos que azolaba la zona intentó invadir el pueblo y se abrió la tierra. Con el tiempo el lugar tomó el nombre del Humilladero del Atajo, donde los peregrinos se humillan, bajan de sus cabalgaduras o de sus cómodos vehículos y recuerdan el hecho histórico de la protección de la Virgen y prosiguen a pie el camino al santuario.

“También hoy nos acechan hordas salvajes que piratean por el río y se mueven libremente por nuestras calles sembrando destrucción y muertes, algunas más visibles que otras. Asestan dardos mortíferos en los más vulnerables, que son los niños y los jóvenes, ofreciéndoles una salida fácil y placentera. Pero tan efímera como devastadora. Escucha madre el clamor de tus hijos, protégelos con tu manto maternal y al mismo tiempo dale la sabiduría y la luz para saber dónde está el verdadero enemigo de la condición humana. El padre de la mentira, el que engaña con la promesa de alcanzar una vida feliz y segura, en poco tiempo y sin esfuerzo alguno”, aludiendo a lo nefasto del narcotráfico que atenta contra la condición humana, destruye y carcome los cimientos de la comunidad.

Al mismo tiempo pidió a la Virgen a que nos enseñe a “ser verdaderos peregrinos, a bajarnos de nuestras comodidades y aprender a caminar uno junto al otro; atentos al que está a nuestro lado y dispuesto siempre al servicio, especialmente con los más necesitados. Recuperemos la sabiduría del humilladero, que heredamos de nuestros padres y abuelos; pongamos en el centro de nuestras vidas a Dios y aprendamos de la Virgen a ser lo que Él quiere”.

Además del primer mandatario estaban compartiendo de los actos religiosos el vicegobernador de la provincia, Gustavo Canteros, a los m ministros de Seguridad, Horacio Ortega; de Turismo, Inés Presman; de Educación, Susana Benítez; el diputado nacional y candidato a gobernador, Gustavo Valdés; el senador nacional Pedro Braillard Poccard; el jefe de Policía de la provincia de Corrientes, Eduardo Acosta, legisladores provinciales.; (Turismo), el interventor del ente regulador del Agua, Arturo Vazquez; otros funcionarios provinciales y comunales, autoridades eclesiásticas y representantes de fuerzas de seguridad.

Coronación Pontificia de la Virgen de Itatí

Cabe acotar que la coronación pontificia de la Virgen de Itatí marcó un acontecimiento notable y apoteótico desde los tiempos de los festejos del III Centenario de la Fundación de Corrientes en 1888, y no tendría continuidad con otro suceso de su jerarquía hasta la Consagración de Monseñor Luís María Niella como Primer Obispo de Corrientes en 1911.

La historia dice que el 16 de julio de 1900, en las puertas del Santuario de la Santísima Cruz de los Milagros de Corrientes, la Imagen Taumaturga de la Pura y Limpia Concepción de Nuestra Señora de Itatí, traída en barco desde su trono en una marcha cargada de hondo sentimiento, fue solemnemente coronada por el Obispo de Paraná Monseñor Rosendo de la Lastra y Gorillo, ante los Obispos del país, de Paraguay y Uruguay. El Presidente de la República, Gral. Julio Argentino Roca, de puño y letra, envió una misiva; asistieron o enviaron representaciones mandatarios provinciales. Apadrinó el acto el Gobernador de Corrientes y fue Madrina Da. Josefina Hardoy de Gallino, Presidenta de la Comisión Central de Damas.

La corona impuesta sobre las sienes de la Imagen de la Virgen, había sido concebida por Forment Maurice como una exquisita joya al estilo de las coronas imperiales del Renacimiento, en oro, con incrustaciones, en sus engarces, de amatistas y topacios de gran tamaño, y dibujos afiligranados de artística expresión.-