Chaco: crece el conflicto en el Instituto de Cultura y los trabajadores siguen de paro

Sociedad

La medida de fuerza comenzó esta mañana, con la permanencia de trabajadores nucleados en ATE dentro del edificio ubicado en Arturo Illia 245 de la Ciudad de Resistencia. Las acciones continuarán mañana, y los manifestantes anunciaron una conferencia de prensa para las 8.30. El pase a planta de trabajadores precarizados y aumentos salariales encabezan los reclamos. Hubo fuertes cruces con Héctor Bernabé, titular del área.

Esta mañana resonó la situación problemática que viven los trabajadores del Instituto de Cultura de la Provincia del Chaco tras el inicio de un paro por 48 horas que decidió un grupo nucleado en ATE para reclamar distintas cuestiones que afectan tanto a nivel laboral como a la vida diaria del conjunto.

En ese sentido las acciones de protesta constaron en la permanencia de los trabajadores dentro del recinto que, por momentos, generó tensión por las discusiones entre los manifestantes y el presidente de la institución, Héctor Bernabé, a quien responsabilizan por el conflicto actual.

A continuación compartimos el documento redactado por los trabajadores, en el que se detallan los puntos del reclamo y la situación que llevó a la medida de fuerza.

 

El comunicado

Trabajadores y trabajadoras del Instituto de Cultura del Chaco, nucleados en la ATE, llevamos adelante una medida de fuerza consistente en un paro de 48 horas, los días jueves 3 y viernes 4 de agosto, con una permanencia pacífica en la sede de Arturo Illia 245, debido a la apremiante situación vivida por la mayoría de los trabajadores y para impulsar las urgentes demandas de nuestros/as compañeros/as.

Las principales y más acuciantes demandas planteadas son:

* URGENTE PASE A PLANTA de los trabajadores precarizados, situación por la que venimos luchando desde hace años y que según fuera reconocido por el ministro de Hacienda, Cristian Ocampo, en audiencia con nuestro sindicato ATE “están dadas las condiciones” para que se realice; sin embargo, vemos la absoluta desidia de las autoridades para avanzar en este sentido.

* Urgente tratamiento del proyecto de ley que contemple la particular situación laboral del trabajador cultural.

* Aumento salarial para personal temporal y permanente, es decir reparación y equidad con sueldos de otras áreas del Ejecutivo, ya que son los haberes más bajos de la provincia, agravado por el deterioro del salario real, también contamos con compañeros becados que perciben un vergonzoso monto de $ 3000 y deben prestar 30 hs de servicios semanales.

Además, el personal precarizado de Cultura (cuyo único instrumento de relación laboral es un “convenio”) no cuenta con aumento de sus honorarios desde hace más de un año, pese a ser la mayoría de la masa de trabajadores de la institución.

* Es de urgente tratamiento con los responsables del Poder Ejecutivo las continuas anomalías en la gestión institucional cultural, llevando al incumplimiento de políticas culturales, que fueron consideradas ejes centrales en los objetivos del organismo y que se encuentran debidamente establecidas en la LEY PROVINCIAL DE CULTURA (6255/09). Dicha legislación estipula la Promoción Sociocultural, para la democratización de la acción cultural provincial, hoy abandonadas por decisiones del actual Directorio, sumándose al incumplimiento del Decreto 2402/15 de Estructura Orgánica, donde se constituye la Dirección de Promoción Sociocultural en su planta funcional, con la finalidad de “promover y gestionar el desarrollo cultural y de apoyo a la autogestión en las comunidades” en todo el territorio provincial. Denunciamos que esta dirección de Promoción Sociocultural se encuentra subrogada por una persona que no reside actualmente en la Provincia, nombrada por Decreto Nº 811/2017, que además le otorga el beneficio del cobro retroactivo desde diciembre del 2015, cuando en esa fecha hasta mediados del 2016, se encontraba cubriendo esa dirección otra persona nombrada por resolución del instituto (N° 134/15); no solo nos encontramos con un hecho de superposición de cargos e incompatibilidad laboral y de instrumentos legales (Resolución vs Decreto), sino también que se evidencia un desconocimiento de las recomendaciones de la Ley Nº 5248 de “Ética y Transparencia en la Función Pública”. Esta Dirección cuenta con tres jefaturas de acción, hoy sin llamado a Concurso para ejercer los cargos directivos y reducidos actualmente a una simple área de abordaje territorial que en nada representa los objetivos de la ley provincial.

* Los elencos, centros culturales y museos no cuentan con organigramas que posibiliten no sólo la carrera dentro de estas instituciones sino que también se desconocen las importantes tareas como la gestión, guías, promoción, mantenimiento, archivo, difusión, administración, preservación, salvaguarda y puesta en valor del patrimonio material e inmaterial que albergan.

* No debemos dejar de mencionar las deplorables condiciones edilicias en la que se encuentran cada uno de los espacios de trabajo (sede central, centros culturales, museos y departamentos). Sin ventilación necesaria, filtraciones de agua y aceite, paredes electrificadas, entre otras situaciones adversas, que afrontan los trabajadores cada día.

Los trabajadores culturales del Estado Provincial, por las circunstancias que hemos mencionado y que no retratan el total de deplorables condiciones de trabajo y de gestión, nos encontramos en alerta y constante organización para llevar adelante las acciones necesarias para la defensa de nuestro patrimonio y poniendo en valor las políticas culturales de inclusión, democratización y territorializacion de nuestra cultura, sus bienes, servicios, expresiones y creaciones, al servicio del desarrollo local y regional para las cuales trabajamos.

Apelamos públicamente una vez más a las autoridades del organismo y al Ejecutivo de la provincia a que estas cuestiones sean atendidas, respetando la organización y la participación sindical de los y las trabajadoras del Instituto de Cultura, y arbitrar con las herramientas democráticas que supimos conquistar como sociedad.