Tras la usurpación del viernes, los okupas se mantienen firmes y aseguran que no se irán. Al menos cinco grupos se asentaron ayer allí con el consentimiento de los que ya estaban. A unos 100 metros, varias personas también instalaron carpas en espacios verdes.
Luego de que decenas de familias se asienten el viernes en un terreno del barrio 17 Agosto, se dieron nuevos ingresos de personas en el mismo predio ayer. El baldío que se encuentra sobre calle El Trébol, entre Groussac y Dumas y algunos de los okupas comentaron que “se sumaron cinco familias pero dentro del mismo predio”.
De esta manera, algunos de los grupos que ya se encontraban allí instalados le permitieron el ingreso a otros, cediéndole una porción del lote que ya tienen demarcado. Previamente, durante la noche, algunas personas comentaron que hubo intentos de otras familias para entrar al terreno pero finalmente no ocurrió por la reacción de los okupas que están allí desde el viernes.
Una de las personas que habita el predio comentó al medio EL Litoral que: “estuvimos tranquilos y no hubo ningún inconveniente”, haciendo referencia a la posibilidad de conflicto que podía darse entre ellos y los vecinos frentistas o los propietarios de las tierras.
Respecto de la presencia policial, los okupas indicaron que “no hacen guardia permanente, sólo pasan de vez en cuando y hacen patrullaje”. Incluso, ayer al mediodía no había oficiales en el predio en cuestión.
Las familias que ocuparon el predio se reunieron ayer por la mañana para discutir y analizar los pasos a seguir. Tras la charla que mantuvieron, aseguran que no se retirarán de allí. “No nos vamos a ir, nos vamos a mantener firmes”, indicó una persona.
Cambios
Más allá de que la toma fue el viernes y hace sólo tres días que las familias se asentaron allí, en el predio ya se advierten algunos cambios respecto del comienzo, cuando recién arribaron. Lo cierto es que ayer continuaban con las tareas de limpieza y desmalezamiento en los distintos lotes que fueron marcados por ellos mismos.
Además de las carpas que había el primer día, ahora se observan algunas estructuras que están comenzando a montarse precariamente. De esta manera, mientras algunos cortaron ayer el pasto, otros utilizaron palas y otras herramientas para afirmar unas materas en el suelo e improvisar un refugio con plástico o lona. “No vamos a construir nada todavía pero es para estar mejor, sobre todo para pasar la noche”, comentó una de las personas que se encuentra en el terreno.
Los okupas estiman que esta semana puede ser clave con respecto a lo judicial. Vale recordar que una de las personas que se presentó como propietario del lugar aseguró que ya había hecho la denuncia en fiscalía y aguarda que pueda haber definiciones en el corto plazo.
Tomas cercanas
En el mismo barrio, el 17 de Agosto, otros predios comenzaron a ser usurpados ayer en cercanías del que fue tomado el viernes. Durante la siesta de ayer, se encontraban instaladas algunas carpas en un espacio verde de un cuarto de manzana aproximadamente, que tiene viviendas linderas.
Esta porción de tierra se encuentra a unos 100 metros del otro, en la esquina de las calles Florencia y Paul Groussac, a media cuadra de la avenida Cazadores Correntinos. En tanto, un grupo de personas cortaba el pasto ayer en otro predio, que queda también en cercanías.
De esta manera, son varias las tomas que se dieron en el mismo barrio en pocos días, y resta develar si las familias que ingresaron permanecerán allí o habrá cambios a partir de posibles decisiones judiciales al respecto, tal como sucedió hace dos semanas en un baldío de las 550 Viviendas del Pirayuí.
Por lo pronto, los okupas se mantienen en alerta y buscan alternativas para permanecer en el lugar, organizando comidas comunitarias y cuestiones similares para los habitantes del predio. Por otra parte, insisten con la posibilidad de comprar los espacios del predio que ocupan en cuotas, una cuestión que fue desestimada en el comienzo por una de las personas propietarias.
El Litoral.
