Docentes rendían para ocupar cargos como directores y los atraparon copiando

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Uno es director suplente de una escuela secundaria técnica de San Rafael. Tenía escondidos 10 machetes escritos a mano.

«No se copien, porque al primero que encuentre copiando le quito la hoja y lo desapruebo». Esa frase, dicha y repetida infinidad de veces por docentes, es la que parece que olvidaron dos directores suplentes que fueron encontrados copiándose en el concurso de jerarquía directiva de Mendoza, que el 31 de julio pasado rindieron 3.576 postulantes. Fiel a la técnica que pudo usarse en su época de estudiante, uno de los copiones se «ayudó» con 10 machetes.

El lunes pasado la Dirección General de Escuelas concretó el primer examen de ese concurso en dos zonas: Norte, que dispuso de las facultades de Filosofía y Letras, Derecho, Ciencias Políticas y Sociales, y en los BACT (bloques de aulas comunes y Tecnológicas) de la UNCuyo; y Sur, donde los aspirantes rindieron en 27 salas de la Escuela Nº4-087 Manuel Ignacio Molina, en San Rafael.

Allí se presentaron quienes pretendían cargos jerárquicos en Nivel Inicial, Primario, Secundario, de jóvenes y adultos, Educación Especial y centros de capacitación para el trabajo (CCT). Para esto habían recibido durante meses una capacitación de la Subsecretaría de Planeamiento y Evaluación de la Calidad Educativa y la Dirección de Educación Superior.

Este primer examen era escrito, por lo que se dispuso de veedores para controlar los exámenes en cada lugar.

Con 10 machetes en la manga

A uno de esos veedores que estaba a cargo de una sala de San Rafael le pareció al menos sospechosa la actitud de uno de los aspirantes que salía a cada rato al baño. Extraoficialmente trascendió en el diario online Información Ciudadana que el hombre en cuestión, abandonando toda originalidad, había avisado antes de comenzar el examen que esa situación lo ponía nervioso «y los nervios le daban ganas de orinar».

Sin embargo, no fue demasiado difícil para el veedor detectar que ese aspirante traía algo entre manos y cuando se acercó para corroborarlo, descubrió que tenía un puñado de machetes.

«Lo pescaron in fraganti con 10 machetes y en el momento se labró un acta ante un escribano y se dio aviso a las autoridades de mesa. Se trata de un director suplente de una escuela secundaria técnica de San Rafael», confirmó Francisco Fernández, director de Asuntos Jurídicos de la DGE.

Periodistas de  Diario UNO tuvo acceso al nombre del director y la escuela en la que ejerce como suplente, la no publicación de esos datos obedece al secreto de sumario en el que está la causa, hasta tanto avance la investigación sumarial, que ya inició la Dirección de Educación Secundaria.

«Debido a que el aspirante a director es docente titular y ejercía aquel cargo como suplente, ahora la Dirección de Secundaria evaluará sus antecedentes. Allí se deberá decidir si se lo toma como titular (por el cargo de base que tiene), se lo enviará a la Junta de Disciplina, donde podrá hacer su descargo; ahora, si se lo contempla como suplente con un informe motivado y fundado de su superior (en este caso un supervisor), se le puede dar de baja en su cargo y por un año no podrá presentarse a concursar ningún cargo», precisó Fernández.

Otro caso en el Gran Mendoza

Pese a que no trascendieron demasiados detalles, desde la DGE confirmaron que otro caso de aspirante copiador se dio en la zona Norte. Aquí, quien fue descubierto copiando sería un aspirante de una escuela secundaria de Educación Especial.

«Por lo que sabemos también era un directivo suplente que usaba para copiar un dispositivo similar a un audífono», contaron escuetamente desde Gobierno. Se especula con que el aspirante a director contaba con alguien que le transmitía información por ese dispositivo.

Después del descubrimiento se aplicó el mismo protocolo, solo que aquí intervino la Dirección de Educación Especial, que será quien deberá expedirse sobre la sanción que se le aplicará a este docente.

Otro examen práctico y oral

Para aprobar el primer examen escrito los postulantes debían superar los 18 puntos y así lograban pasar a la próxima etapa en la que deben hacer una pasantía en una escuela de su nivel y modalidad, y posteriormente dar un examen oral con la propuesta para esa institución.

Tres instancias evaluativas

Al examen escrito, que debía aprobarse con al menos 18 puntos, se sumará una pasantía que los postulantes deberán hacer en el nivel y la modalidad a los que aspiran, y luego un examen oral con la propuesta que harán.
3.576 postulantes rindieron el concurso Buscan quedarse con alguno de los 900 cargos vacantes que hay en esa jerarquía en la provincia.

«La dirección de cada especialidad evaluará la sanción, pero puede darse que un superior les dé la baja y no puedan concursar ningún cargo durante un año» (Francisco Fernández, dir. de Asuntos Jurídicos).

Diario Uno.