La mujer había sido vista con vida por última vez el pasado 10 de agosto. El dueño del vehículo permanece detenido.
Los análisis de ADN confirmaron que el torso de una mujer encontrado en las aguas frente a Copenhague pertenece a la reportera sueca desaparecida Kim Wall, confirmó hoy la Policía danesa en Twitter.
Wall, de 30 años, fue vista por última vez en la tarde del 10 de agosto a bordo de un submarino de fabricación artesanal construido por el danés Peter Madsen, cuando ambos abandonaban el puerto de Copenhague.
Jens Moller Jensen, de la Policía de la ciudad y a cargo de la investigación, dijo que la cabeza y los brazos del cuerpo fueron «cortados deliberadamente», informa Clarín.
Las autoridades de Copenhague dieron una conferencia de prensa en la mañana del miércoles en la que señalaron que se encontró sangre de Wall en el submarino y que la manipulación del cadáver se hizo al parecer para que se hundiera en el fondo del mar.
«Los cortes en el torso se hicieron para asegurarse de que salieran el aire y los gases para que el cuerpo no flotara en la superficie», explicó Moller Jensen. La autopsia fue «larga y complicada debido a la ausencia de extremidades», agregó.
Madsen, que al principio dijo que había dejado a la periodista a salvo en una zona del puerto, finalmente confesó que había muerto en un «accidente» a bordo.
El dueño y diseñador del submarino de 18 metros de largo está acusado de homicidio involuntario y se encuentra en prisión preventiva desde el 12 de agosto.
Wall, que trabajaba como freelance, estaba escribiendo un reportaje sobre Madsen cuando desapareció. El sospechoso también es conocido en Dinamarca por diseñar cohetes, por lo que había sido bautizado por los medios como «Rocket Madsen» (Cohete Madsen).
Cerca del lugar donde se encontraron los restos el lunes, la Policía mantiene una amplia operación de búsqueda que incluye buzos. El hallazgo del torso fue un elemento determinante en la investigación, subrayó Moller Jensen.
Madsen confesó que había habido un accidente a bordo y que luego había enterrado a Wall en el mar.
La familia de la reportera reaccionó hoy con un «inmenso dolor» a la confirmación de su muerte. «No podemos desentrañar el alcance del desastre y muchas preguntas siguen sin respuesta», escribió en Facebook la madre de la víctima, Ingrid Wall.
También añadió que han recibido numerosos mensajes de apoyo que muestran «cuán amada y apreciada era, como persona y como profesional del periodismo».
Telefe.