Un operativo sin precedentes en la provincia de Santa Fe fue llevado a cabo por el Ministerio de Seguridad de la Nación, a cargo de Patricia Bullrich. Luego de una extensa investigación, se desarticuló una organización criminal dedicada al manejo de desarmaderos ilegales.
Fue a través de la Dirección Nacional de Investigaciones, en un trabajo conjunto con la Policía Federal Argentina, que derivó en el secuestro de más de 3 millones de autopartes y la detención de 36 personas.
“Asumimos el compromiso de llevar adelante políticas activas de lucha contra los desarmaderos en todo el territorio nacional. Detrás de la venta ilegal de autopartes se esconden muchas veces hechos realmente graves que generan mucha preocupación a los vecinos”, sostuvo la ministra Bullrich, quien instruyó políticas expresas a la Secretaría de Seguridad que dirige Eugenio Burzaco.
Funcionarios de la Dirección de Fiscalización de Desarmaderos y Autopartes, que depende de la Dirección Nacional de Investigaciones que encabeza Rodrigo Bonini, y la División Sustracción de Automotores de la Policía Federal, institución que comanda Néstor Roncaglia, realizaron una exhaustiva investigación que incluyó registros fotográficos, fílmicos, entrecruzamiento de datos y vigilancias estáticas y dinámicas. Además, para obtener detalle de los predios utilizados por esta banda, se utilizaron helicópteros del Departamento Escuadrón Aéreo de la Policía.
Como resultado de estas tareas de inteligencia criminal se recopiló la suficiente información para que el Juzgado Penal de 1° instancia del distrito N° 2 de Rosario, a cargo del Dr. Juan Donolla, autorizara 16 allanamientos que fueron llevados a cabo por el personal de Delitos Ambientales de la PFA.
Como resultado de estas requisas desarrolladas en la ciudad de Rosario se obtuvieron cifras históricas: se decomisaron 3.373.200 autopartes ilegales valuadas en 120.000.000 pesos. Además, 36 personas fueron aprehendidas y ocho lugares fueron clausurados.
El juzgado interviniente ordenó, también, el secuestro de dos armas de fuego, varias computadoras, equipos de comunicación y 20 vehículos, algunos de alta gama y en proceso de desguace.