Cuatro integrantes mapuches declararon bajo juramento. Uno de ellos afirmó que vió el episodio en el que desapareció el artesano y otro desmintió a la fiscal Avila quien dijo que no se pudo rastrillar la zona porque los mapuches lo impidieron.
A más de un mes de la desaparición de Santiago Maldonado, un grupo de cuatro mapuches declararon ante el juez Guido Otranto en el juzgado de Esquel y afirmaron, esta vez a cara descubierta, que vieron cómo Gendarmería se llevó al artesano de 28 años el 1 de agosto.
“Yo vi cómo a Santiago se lo llevó Gendarmería”, afirmó Matías Santana, uno de los integrantes de la comunidad Pu-Lof, que anteriormente había declarado encapuchados ante la Procuraduría de Violencia Institucional.
“Desde el 31 los gendarmes estaban en la zona, pero fue al otro día a la mañana que deciden ingresar a nuestro territorio. Entraron reprimiendo a los integrantes de la comunidad, con armas y con una balacera. Tuvimos que replegarnos hasta el río, yo para escapar agarré un caballo y crucé el río hasta subir a una loma”, comentó el hombre.
Santana continuó en su relato y afirmó que “desde la loma” pudo “ver con unos binoculares, cómo tres gendarmes golpeaban un bulto que tenía una campera celeste” que él le había prestado a Maldonado. “Después de que le pegan, cargan el bulto y lo llevan hasta un Unimog, que luego pasan a una camioneta blanca que se dirige por la ruta 40 rumbo a Esquel”, aseguró.
El mapuche no tiene dudas de que al joven desaparecido se lo llevó la Gendarmería. “No tenemos dudas, yo ví como a Santiago se lo llevó la Gendarmería”, dijo Santana, quien aseguró que esperaron 34 días para declarar a cara descubierta porque en un principio no eran apoyados por toda la población. “Ahora tenemos el apoyo de toda la sociedad. Aunque sabemos que seremos perseguidos, estamos confiados en que gran parte de la gente nos apoya”.
Radio Mitre.