La mujer está detenida por el delito de “corrupción de menores agravada”. Una guardiacárcel contuvo a la nena porque lloraba y tenía dificultades para caminar.
Liliana Elizabet Galata, de 35 años de edad, fue detenida tras visitar el penal de máxima seguridad de Campana junto con su pequeña hija de tan sólo 7 años, quien entregó a su pareja para que abusara carnalmente de ella.
Galata, empleada, soltera y con domicilio en Caseros, asistió a la Unidad Carcelaria Nº21 para visitar a su pareja Matías Facundo Moyano, pero al intentar retirarse del lugar, una empleada del Servicio Penitenciario advirtió que la menor lloraba y se quejaba de tener dolor en la zona genital.
La empleada preguntó a la madre de la menor, quien aseguró que su hija había sido violada por su padre biológico la semana anterior. Inmediatamente se dispuso del traslado de la menor al Hospital zonal San José, donde se determinó que la nena de 7 años presentaba signos de abuso sexual de antigua y reciente data, como así también enfermedades de transmisión sexual.
Al continuar con las investigaciones se determinó que el 6 de octubre pasado, el padre biológico de la nena había presentado una denuncia en una comisaría de Tres de Febrero asegurando que su hija había sido víctima de abuso.
El hombre precisó que estaba separado de la madre de la niña, con quien había vivido en Caseros, pero acusó a la mujer de llevarla a la casa de su pareja y de amigos, donde la pequeña había sido violada en reiteradas oportunidades.
Tras analizar todos los elementos, la fiscalía de Campana dispuso la aprehensión de la madre de la niña, la cual fue detenida en el hospital por el delito de “corrupción de menores agravada” y se imputó a su novio, el detenido Matías Moyano, por abuso sexual con acceso carnal.
