La Justicia de San Martín condenó a cadena perpetua a un hombre que asfixió y asesinó a su beba y del cual sus hermanitos fueron testigos.
En marzo de 2015 un hombre asfixió y mató a su beba de cinco meses a quien llamaban “Cony” o “Conita”. Cuando su madre volvió de trabajar la encontró en el cochecito sin vida y los hermanitos fueron testigos. “Él le seguía pegando porque ella lloraba…yo le decía a Pablo que eso no se podía hacer”, dijo uno de los niños.
Por este hecho, el Tribunal Oral en lo Criminal N° 7 de San Martín determinó que Pablo Cortés fue el autor del homicidio doblemente agravado por el vínculo y por alevosía y lo condenó a cadena perpetua.
El feroz asesinato de la beba ocurrió el 29 de marzo de 2015. Pablo Cortés y Romina Palazzo estaban separados, pero seguían en contacto por la hija que tenían en común. La mujer se fue a trabajar al bar del cual era empleada y cuando regresó se encontró con la peor escena, enseguida Romina se fue a la guardia del hospital, pero ya era tarde.
Cienradios.
