La Asociación Bancaria (AB) que conduce Sergio Palazzo ultima detalles para una movilización nacional antes del 10 de diciembre próximo en rechazo de las reformas laboral y previsional en general y de gran parte de los cambios impositivos que impulsa el gobierno, y señaló que esas iniciativas oficiales «están de forma íntima ligadas entre sí».
En declaraciones radiales, el también jefe de la Corriente Federal de Trabajadores (CFT) que reúne a una treintena de organizaciones gremiales sostuvo que en lo laboral se procura afectar «el derecho del trabajo, lo que retrotrae la situación a un siglo».
Palazzo explicó que el proyecto de reforma laboral deroga «el artículo 12 de la Ley de Contrato de Trabajo (LCT), que establece el principio de irrenunciabilidad de los derechos de los trabajadores», y añadió que la iniciativa «elimina premios y presentismo, prácticamente todo, y solo sobrevive el salario básico con el único objetivo y propósito de que sea barato despedir, tal como procura el sector empresario».
«La Bancaria rechaza de forma absoluta ese paquete de reformas y ya decidió el estado de alerta y movilización en la actividad, porque esa iniciativa del gobierno constituye un verdadero despojo y representa para la sociedad un ajuste sin fin», sostuvo Palazzo.
El dirigente sindical repudió «la reforma permanente oficial sobre lo laboral, previsional y tributario» y también «las propuestas que afectan a la Ley de Contrato de Trabajo (LCT)».
«Se trata de un ajuste sin fin sobre los derechos e ingresos de los trabajadores, con o sin empleo formal, o de los jubilados. Es una regresión de más de cien años a situaciones de injusticia laboral, como la intención de extender la jornada de trabajo y de habilitar a los empleadores a alterar los horarios, promoviendo la creación del «Banco de horas». Es un despojo que afectará el derecho a ordenar la vida cotidiana», aseguró Palazzo.
Ámbito.