El agresor habría disparado al aire para celebrar la llegada de la Navidad y una bala perdida impactó contra el cuello de la menor, que falleció en el Hospital Fiorito provincia de Buenos Aires.
El 24 de diciembre no terminó como una Noche Buena en la localidad de Villa Tranquila, partido de Avellaneda, donde una menor de siete años murió de un escopetazo en un confuso episodio en el que quedó detenido un conocido de la familia de la víctima.
Jazmín Jérez recibió un balazo en el cuello y fue trasladada, junto a su madre y su hermana mayor que también resultaron heridas, al Hospital Fiorito, aunque llegó en estado crítico y finalmente falleció.
El presunto autor del disparo tiene 44 años y quedó detenido. Según vecinos de la zona, el agresor ya tenía antecedentes violentos y vivía en la casa contigua al hogar de la menor.
Según fuentes policiales el disparo fue un tiro al aire para festejar la llegada de la Navidad. Sin ningún tipo de conciencia respecto de la brutalidad que estaba cometiendo, el irresponsable disparó dos veces al aire con una pistola calibre 14 y el segundo tiro habría sido el que impactó a la menor, mientras que su madre y hermana resultaron heridas en la mano y el brazo izquierdo.
Más tarde, a media mañana y en relación a la muerte de la nena, se produjeron peleas e incidentes entre los vecinos y tuvo que intervenir la policía bonaerense. Los efectivos llegaron al lugar, tuvieron que dispersar a los vecinos que se enfrentaron primeros a las piñas y luego a los tiros.
