“Parecía una cabeza sobre otra cabeza”. Así describía el neurocirujano del Hospital Nair en Mumbai, Trimurti Nadkarni, el insólito tumor al que se enfrentaron hace unos días. Finalmente, los médicos lograron extirpar el que parece ser el más grande del mundo: un tumor de 1,8 kilos y 20 por 30 centímetros.
Al parecer, en los últimos años Santlal Pal había estado observando cómo crecía un tumor sobre su cráneo. Ocurre que en el último año se había acelerado sobremanera. La masa se estaba pegando a la parte posterior de la cabeza de Pal. Su cráneo y cabello crecieron sobre él, y el tumor parecía tan grande o más que la propia cabeza del hombre.
Santlal pasó por un largo tratamiento con quimioterapia, pero la masa seguía creciendo. Según ha contado a los medios su hermano Akhilesh Pal, “llegó un momento en que se sentía demasiado pesado, la cabeza le dolía constantemente y su visión comenzaba a estar borrosa”.
Tras pasar por cientos de consultas, los doctores le dijeron que alrededor del 10% del tumor crecía dentro del cráneo de Pal, por lo que estaba ejerciendo presión sobre su cerebro y le hacía perder la vista. Dicho de otra forma, los médicos le advirtieron que si no se trataba rápido y con éxito, podría causarle un daño neurológico o parálisis irreversible.
La operación, de más de seis horas, tuvo lugar en el Hospital Nair, espacio donde los médicos lograron eliminar con éxito el considerado como tumor cerebral más grande del mundo. Según ha explicado Trimurti Nadkarni, jefe del departamento de neurocirugía: «Tuvimos que cortar el cuero cabelludo y parte del hueso para extirpar el tumor. El tamaño del mismo era un desafío, y teníamos que asegurarnos de mantener la presión arterial mientras se realizaba la cirugía. La parte del tumor dentro del cráneo se eliminó realizando una abertura en el mismo».
Los médicos han explicado que ahora está fuera de peligro y sólo necesita reposo. También esperan que pueda recuperar la vista por completo, sobre todo dado que este tipo de extirpación quirúrgica de tumores cerebrales tiene una serie de altos riesgos, de hecho, la cirugía en un tumor cerca de los nervios que se conectan a los ojos puede conllevar un riesgo de pérdida de la visión.
Si el tumor cerebral está ubicado en un lugar que lo hace accesible para una operación, el cirujano trabajará para extirpar la mayor cantidad de tumor cerebral posible. En algunos casos, los tumores son pequeños y fáciles de separar del tejido cerebral circundante, lo que hace posible la extirpación quirúrgica completa.
Sin embargo, en otros casos los tumores no se pueden separar del tejido circundante o están ubicados cerca de áreas sensibles en el cerebro, lo que hace que la cirugía sea un riesgo. En estas situaciones, el médico extirpa la mayor parte del tumor que sea seguro. Hay que pensar que incluso la eliminación de una porción del tumor cerebral puede ayudar a reducir sus signos y síntomas.
Fuente: [The Washington Post vía ScienceAlert]