Al término de la autopsia al cuerpo de Débora Pérez Volpin, fuentes cercanas a los peritos señalaron que se encontraron perforaciones en el estómago y el esófago. Ahora habrá que determinar qué fue lo que causó esas lesiones.
Para los peritos, las perforaciones halladas en el estómago y el esófago son clave para determinar que existieron responsabilidades de los médicos del Sanatorio de la Trinidad durante la endoscopía. Esto es, que Pérez Volpin no sufrió una muerte súbita.
Por pedido de la familia, el cuerpo de la periodista y legisladora fue sometido a la autopsia en la morgue judicial desde la madrugada.
El procedimiento indica que los forenses primero informarán al juez sobre los resultados macroscópicos, como lesiones de órganos, que es lo más visible y se podrá determinar rápidamente. En cambio, para saber si la anestesia tuvo influencia en el paro cardiorrespiratorio se necesitarán otros estudios y un análisis de sangre.
Pasadas las 21 terminó el procedimiento, pero aún no se sabe cuándo se llevarán el cuerpo. Previo al retiro, la fiscalía tiene que dar su autorización y la familia debe ir con un coche fúnebre. Los peritos de ambas partes ya se retiraron del lugar.
La causa fue caratulada como «homicidio culposo» y está a cargo del juez Gabriel Ghirlanda y de la fiscal Nancy Olivieri. Fuentes judiciales confirmaron a este medio que una médica se autoimputó espontáneamente en la comisaría 23ª de la Policía de la Ciudad, donde también la familia de la ex conductora de Arriba Argentinos realizó la correspondiente denuncia.