Las menores, de 10 y 12 años, revelaron a su madre que sufrieron abusos sexuales por parte de sus hermanos. Uno está detenido, pero el otro sigue prófugo.
Por lo que se pudo saber, las vejaciones ocurrían hace tiempo e incluían golpes. Todo pasó en una vivienda de San José del Boquerón, en Santiago del Estero.
«Nos pegan y llevan al monte para violarnos», confesó uno de las nenas según informó El Liberal. Los acusados tienen entre 25 y 27 años, y aprovechaban los momentos en que quedaban al cuidado de las nenas para agredirlas y abusarlas.
La mujer dijo que sospechaba que pasaba algo entre sus hijos, que actuaban como celosos y protectores de sus hermanas. Tras la confesión de las chicas, los denunció.
Seis meses después, la Policía detuvo a uno de ellos, que volvió a la casa después de trabajar durante seis meses en los montes y aserraderos de Chaco. Por otra parte, su hermano sigue prófugo.