Empresarios textiles criticaron al Gobierno: «Peor es pelearse con la realidad»

Economia

El representante de la industria textil, Ariel Schale, advirtió que «lo peor que puede hacer un gobierno es pelearse con la realidad». Enfrentamiento entre empresarios textiles y la Administración de Macri.

El director ejecutivo de la Fundación Pro Tejer, Ariel Schale, advirtió hoy que «lo peor que puede hacer un gobierno es pelearse con la realidad», en medio de  la puja surgida en los últimos días entre representantes del gabinete nacional y empresarios.

El representante de la industria textil aludió de este modo a las declaraciones del ministro de Producción, Francisco Cabrera, quien aseguró que «hay que tener una agenda positiva y dejarse de llorar».

«Es una declaración desafortunada y errada también porque, no solamente en el tono sino en los conceptos, hay un error de diagnóstico y esto es lo que más nos alerta, más allá de una declaración enojada de parte del ministro. No lloramos», enfatizó.

Dijo que el sector «no para de de invertir y de generar trabajo, de hacer lo que podemos hacer en un contexto muy difícil».

«El problema de Argentina es de competitividad sistémica, por eso echar la culpa de la falta de competitividad al industrial es un error de diagnóstico serio. Lo peor que puede hacer un gobierno es pelearse con la realidad», en declaraciones a FM La Patriada.

Señaló que «hay todo un sistema de entorno macroeconómico y funcional de la economía argentina que hace que lo que bien producimos adentro de nuestras fábricas llegue a precio no competitivo al consumidor final».

«Una de las afirmaciones del ministro Cabrera fue que la ropa es cara y esa es una verdad a medias. Efectivamente en la Argentina, por la vigencia de una matriz no competitiva sistémica, todo es caro. No solamente los textiles: el calzado, la industria electrónica, la metalmecánica, los fármacos, los alimentos», consideró.

Explicó que «del ticket de una ropa nosotros nos quedamos neto de impuesto con el 8,5 por ciento de algo vendido en un shopping, siempre y cuando la prenda sea nacional, porque hoy prácticamente entre el 60 y el 70 por ciento de la ropa que se vende en los shoppings es importada».

«Ese 8,5 por ciento es la retribución a toda la cadena de valor, que es enorme: desde el algodón, el desmotado, la hilandería, la tejeduría, la tintorería, la confección», puntualizó.