Los allanamientos en la Casa de Gobierno y la separación de Horacio Rey, Roberto Lugo y los hermanos Ismael y Susana Fernández de sus cargos es noticia nacional. Se los investiga por enriquecimiento ilícito y lavado de activos, tras una orden de la justicia federal a cargo de la jueza Zunilda Niremperger y el fiscal Patricio Sabadini.
El funcionario judicial habló en las últimas horas sobre dicho tema y expuso nuevos datos relacionados a la investigación: primero, confirmó que las tareas iniciaron al conocerse la compra de cinco lanchas con precios de 400 mil y 700 mil pesos, las cuales fueron adquiridas por una persona que ya tenía sospechas de corrupción en el Ministerio de Desarrollo Social cuando lo dirigía Roberto Lugo. Cabe mencionar que Lugo es otro de los involucrados en la causa y tiene la lupa encima.
Pero lo que dio el envión final a Niremperger y Sabadini fue la recepción de una denuncia anónima con rigurosos detalles. Además, esa persona de identidad desconocida adjuntó documentos claves para la investigación.
Investigación
En diálogo con el programa radial ‘El oído absoluto’, Sabadini explicó: «en un principio estamos investigando delitos de lavado de dinero, y de evasión tributaria; pero obviamente tenemos que tener en cuenta el delito precedente al lavado que van desde prima facie asociación ilícita, fraude en perjuicio a la administración pública, enriquecimiento ilícito y obviamente incumplimiento de deberes de funcionarios públicos».
Los primeros pasos
En ese sentido, el fiscal también reveló que todo inició con la compra de «cinco lanchas que van desde 400 mil hasta los 700 mil pesos a nombre de una sola persona, que incluso ha sido denunciada como sospechosa en las maniobras con el Ministerio de Desarrollo durante la gestión de uno de los eventuales imputados. Estamos tratando de chequear si en realidad esa persona tenía una Asignación Universal por Hijos. Esa fue la puerta de entrada para la investigación».
«Hay que poner énfasis que esto viene desde el miércoles. El miércoles se precipitó todo porque hicimos un allanamiento en el astillero del señor Szimansky que habría armado las lanchas. Esto empieza todo por las lanchas», agregó Sabadini.
Los investigados
Si bien el fiscal no los nombró, dejó en claro que «uno de los eventuales imputados tiene una responsabilidad previa a la entrada en escena del otro investigado. Uno viene de una gestión anterior, y el otro con manejo de caja más reciente. Hay un nexo que los une que oportunamente daremos a conocer».
Asimismo, Sabadini añadió: «teníamos enfocada la investigación en uno de ellos. A la semana hace presentación espontanea el otro funcionario en cuestión; sin entender mucho de que se trataba hasta que recibimos una denuncia anónima que nos llamó la atención por lo minuciosa, detallada y por las copias de documentales aportadas que fueron suficientes para un indicio. Nuestro desafío fue buscar los originales para ratificar esos indicios».
En lo que respecta a los allanamiento, y la forma en la que se realizaron los mismos, el funcionario judicial explicó: «Yo no le puedo pedir a uno de los sospechoso que mande por oficio lo que preciso. No le puedo pedir a la fiduciaria por oficio que me mande la documentación. A mí me pagan por dudar».
Por último, Sabadino informó que «en los últimos dos días, tanto la magistrada como la fiscalía comenzamos a recibir información de todos lados. Esto es como que destapó un cúmulo de información que todavía tenemos que procesar».