Se trata de José Aguirre, Ricardo Ramírez y José Romero, efectivos de la policía provincial que prestaban servicio en el Grupo de Respuesta Inmediata Motorizada (Grim). La justicia los encontró culpables de abuso sexual doblemente agravado y vejaciones en perjuicio de G. A. K en agosto de 2016.
«Hubo penas contundentes. No hay dudas que el hecho se produjo», manifestó al respecto el fiscal Gustavo Schmid y agregó: “hemos terminado con el debate del caso GRIM. Se hicieron los alegatos, y la Defensa hizo los planteos pidiendo una prórroga del debate teniendo en cuenta que quería contar con las actas, pero el TOP 2 no lo aceptó”.
Asimismo, contó que “la querella pidió 25 años de prisión. Yo, en representación del ministerio público, solicité 18 años de prisión y ambos defensores pidieron la absolución por insuficiencia probatoria. Finalmente el Tribunal ordenó sentencia de 17 años para todos”.
En relación a la decisión, Schmid indicó: “estoy conforme con el fallo, con la pena impuesta. Esto es una consecuencia especial por la víctima -que hasta hoy está medicado, con tratamiento psicológico-. Eran funcionarios policiales que debían preservar la vida de los ciudadanos, por eso pedimos la pena que pedimos. Creo que es justa y razonable”.
“El chico tenía 44 lesiones en el cuerpo y tenía miedo, no creo que en esas condiciones sea fácil salir a hacer una denuncia por violación. Además el test psicológico dice que no miente y estaba bajo los efectos del miedo y la angustia. Los familiares de los agentes probablemente estén convencidos que toda la documentación no es suficiente, pero el chico los reconoce categóricamente a los tres como autores del hecho. Se hicieron rondas de reconocimiento con 15 policías y él los reconoció a los tres”, detalló el fiscal.
Por último, el funcionario judicial sentenció: “una vez que quede firme la sentencia los defensores tiene la posibilidad de apelar al STJ, pero una vez que quede firme serán alojados en la Unidad Penal Nº1; por ahora desconozco dónde quedarán”.