San Juan: ordenan la detención de ginecólogo que abusó de pacientes

Policiales

La justicia de San Juan ordenó la detención del ginecólogo Carlos Martínez, acusado de abusar sexualmente de al menos tres pacientes a las que incluso les pidió que tengan orgasmos en su consultorio con la excusa de tomar una muestra médica.

La disposición fue emitida por el titular del Tercer Juzgado de Instrucción, Guillermo Adárvez, a raíz de un exhorto del juez Pablo Oritja, de la Segunda Circunscripción de Jáchal, donde se tramita la primera denuncia que tiene el profesional en aquel departamento.

Efectivos policiales allanaron tres viviendas, inclusiva la del médico, pero no lo hallaron. Tampoco lo encontraron en los lugares que frecuentaba. En el Centro Integral de la Mujer y el Niño (CIMYN), donde el ginecólogo atiende habitualmente, indicaron que había suspendido todos los turnos.

Al no tener noticias de él, la Justicia estableció que se encuentra prófugo y ordenó que la búsqueda se extienda a nivel nacional e internacional. Según medios locales, podría estar oculto en la casa de un amigo o familiar. Aunque menos firme, tampoco se descarta que haya abandonado la provincia.

Martínez fue denunciado el miércoles pasado por una joven de 22 años embarazada, quien fue a atenderse por una infección urinaria y el médico le dijo que se debía a la “falta de flujo vaginal” debido a la “escasez de orgasmos”. Tras el insólito diagnóstico, comenzó a tocarla para que llegue al clímax y tomar una muestra.

Al conocer el caso de la joven embarazada, otra mujer se contactó con el diario Tiempo de San Juan y contó su historia, en la que asegura que el hombre le realizó un procedimiento similar con la misma excusa.

Además de los dos casos recientes existe una denuncia previa contra el médico nacido en La Rioja, que motivó una investigación judicial en 2017. Se trata de una mujer de Jáchal quien asistió tres veces al consultorio del hombre.

La víctima explicó que en un principio las consultas fueron normales, pero la tercera vez le dijo que le había salido mal un análisis y que para volver a hacerlo necesitaba que tuviera un orgasmo frente a él para “ver la cantidad de flujo que producía”. Si bien en un principio accedió confundida, la paciente sospechó de ésto e hizo la denuncia en la comisaría.