Alfredo Delgado, un hombre oriundo de Quitilipi, nunca imaginó que su paso por la mencionada localidad correntina le saldría tan caro. Antes de ir a la Basílica dejó su coche estacionado en la Costanera, pero cuando volvió a buscarlo encontró el vehículo completamente pintado con aerosol.
El hecho se registró durante el fin de semana largo, momento que Delgado creyó adecuado para recorrer la religiosa ciudad del interior de Corrientes.
Según la denuncia del propietario, él estacionó su Renault Logan en la Costanera de Itatí para luego visitar la iglesia y los alrededores. Hasta ese momento todo iba bien, pero el panorama cambió cuando volvió a buscar el rodado: la carrocería no era la misma, ya que estaba cubierta por dibujos obscenos y agravios hechos por vándalos desconocidos.
En referencia a lo que pasó, Delgado manifestó que “no por eso me deja de gustar ir a Itatí, pero me dolió en ese momento” y pese a la mala experiencia dejó en claro que «el 16 de julio estoy ahí”.