El punto principal del acuerdo es que la Argentina reduzca el déficit y parte de eso caerá sobre las espaldas de las administraciones provinciales.
Esto queda establecido en el documento en donde el ministro Nicolás Dujovne y el ahora ex titular del BCRA Federico Sturzenegger explican que «las transferencias discrecionales a las provincias asociadas a gastos que han sido asignados como responsabilidad de cada provincia por la Constitución se irán reduciendo ya que las provincias tomarán estas responsabilidades.
Estas reducciones en las transferencias discrecionales están diseñadas para garantizar que la incidencia no recaiga sobre la asistencia social ni otro tipo de programas para el alivio de la pobreza que son ejecutados por las provincias.
El ministro de Hacienda de uno de los distritos más importantes del país esto significa un recorte de los fondos en Educación, Salud, Desarrollo Social, Vivienda y Medio Ambiente». El funcionario explicó que el total de programas nacionales que se superpone con funciones provinciales y municipales «son unos $ 130.000 millones».
Desde el palacio de Hacienda explicaron que «los $ 130.000 millones son el total de las transferencias, lo que se superpone es la mitad». Según un trabajo de Idesa, lo que estos cinco ministerios asignan a funciones de las provincias y los municipios representan el 20% del déficit fiscal nacional.
Aunque no cayó bien, las provincias ya venían discutiendo el posible recorte. La Casa Rosada adelantó la intención de compartir el esfuerzo del ajuste con las provincias, y el propio Jefe de Gabinete Marcos Peña lo había dejado por escrito en la previa a conocerse la intención de volver al FMI en una carta titulada «Más provincias, Más Nación.El camino de la Argentina hacia el federalismo fiscal».
En esa carta que se publicó poco menos de un mes antes del anuncio de Macri del pedido de crédito, Peña se preguntaba: «¿debe la Nación darle plata a un intendente para asfaltar una calle? ¿Debe la Nación, existiendo recursos específicos como el FONAVI, construir viviendas en las provincias? ¿Debe la Nación repartir medicamentos en las provincias existiendo los sistemas públicos provinciales?». Como respuesta explicaba que las «grandes transferencias» de fondos hacia la Seguridad Social y las provincias en estos dos años «hacen imposible» que la Nación continúe realizando «las mismas tareas que hacía cuando le tocaba una parte mucho mayor de la recaudación».