El camarista Martín Irurzun en su voto aseguró que la muerte del fiscal fue «directa consecuencia» de la denuncia que había hecho en contra de la ex presidente.
La Cámara Federal porteña confirmó que el fiscal Alberto Nisman fue asesinado tras haber denunciado a la expresidenta Cristina Kirchner por la firma del pacto con Irán sobre la causa AMIA y ratificó la acusación a los custodios por encubrimiento e incumplimiento de los deberes de funcionario público.
Fuentes judiciales informaron que el camarista Martín Irurzun en su voto aseguró que la muerte de Nisman fue «directa consecuencia» por la denuncia que había hecho del pacto con Irán.
El fallo fue firmado por los camaristas Irurzun y Leopoldo Bruglia aunque cada uno hizo su voto y el primero fue más categórico que el segundo al vincular el homicidio de Nisman con la denuncia.
«Nisman fue asesinado horas después de haber formulado una denuncia contra las máximas autoridades del Poder Ejecutivo Nacional y otras personas por haber encubierto a los presuntos responsables del atentado, y horas antes de exponer ante una comisión especial del Congreso Nacional las razones de su proceder», sostuvo Irurzun.
«Si bien dicha circunstancia, por sí sola, no permite definir el vínculo entre el homicidio y la actividad funcional de la víctima, el examen integral del escenario orienta la presunción en tal sentido. Téngase en cuenta que la víctima tenía asignada custodia de diversas fuerzas de seguridad en razón de las amenazas que -como consecuencia expresa de su función-, había recibido tanto él como su entorno familiar», señaló.
De esta forma, el Tribunal no hizo lugar al planteo del abogado Pablo Lanusse, representante de la madre de Nisman Sara Garfunkel, quien había reclamado que se la investigue a la expresidenta como parte de un «Plan criminal» que cometió el magnicidio del entonces fiscal.
Por su parte, Bruglia dijo que «no puede dejar de soslayarse que el homicidio de Nisman se produjo cuatro días después de haber efectivizado la denuncia señalada y horas antes de ir a exponerla ante el Congreso de la Nación, circunstancia que obliga lógicamente a ahondar la investigación en el probable entendimiento de que la muerte del Fiscal se haya producido como consecuencia directa de la especifica acción que adoptó en el marco de su función, como titular de la Unidad Fiscal de Investigación del atentado terrorista perpetrado contra la sede de la AMIA».
En tanto, el tribunal no se expidió sobre el empleado informático Diego Lagomarsino, puesto que quedó firme el procesamiento al no haber apelado sus abogados la acusación que en primera instancia fijó el juez federal Julián Ercolini como «partícipe necesario» del presunto asesinato ocurrido el 18 de enero de 2015, en el tercer piso de una de las torres del complejo Le Parc en Puerto Madero donde vivía Nisman.
Los jueces Irurzun y Bruglia tuvieron en cuenta que «las manchas de sangre que presentaba la mano derecha de la víctima sólo ocupan su dedo índice y pulgar formando un limpio triángulo cuyo vértice se dirige hacia el sector izquierdo de la muñeca, es decir, entre ambos dedos. Dicho patrón es incompatible con la sobreempuñadura de su mano izquierda, pues en tal caso dicho vértice estaría orientado en sentido opuesto».
También aluden a que la posición en que fue encontrado el cuerpo en el baño del departamento implica que el mismo fue acomodado por terceras personas.
Irurzun también hizo referencia a que el asesinato de Nisman contó con la complicidad sobre que «las cámaras de vigilancia no operativas, absurdas demoras en el ingreso a su departamento, irrupción indiscriminada de personas al lugar, invasión del perímetro pericial por personas ajenas a los expertos y deficiente identificación, selección y levantamiento de rastros en los momentos inmediatamente posteriores al hallazgo del cuerpo».
«Todo ello, además, rodeado de llamativas, reiteradas y no habituales comunicaciones desde la noche del sábado hasta avanzado el domingo entre funcionarios de diversas áreas del Estado Nacional -Poder Ejecutivo, Ministerio de Justicia, Ministerio de Seguridad provincial, Jefatura II Inteligencia del Ejército Argentino-«, añadieron.
También el Tribunal ratificó acusación sobre los cuatro custodios de Policía Federal Luis Miño, Armando Niz, Néstor Durán y Rubén Benítez por encubrimiento del crimen e incumplimiento de los deberes de funcionario público.
Miño y Niz estaban asignados en custodia el día domingo, en el que fuera encontrado Nisman sin vida tras el ingreso de ellos al edificio junto con la mamá del fiscal, en tanto que Benítez y Durán lo habían tenido bajo custodia el sábado.
«Se destaca además que los encartados, sabían que ese fin de semana transcurría en circunstancias que elevaban de manera extraordinaria los niveles de riesgo sobre la integridad del funcionario, ya que conocían que el día 14 de enero el Fiscal había efectuado una trascendente denuncia contra las máximas autoridades de la Nación y que el lunes 18 debía concurrir ante una Comisión del Congreso de la Nación para exponerla, con las implicancias políticas e institucionales que ello conllevaba», señaló en su voto Leopoldo Bruglia.
*Diario26