El grupo de Sindicatos Aeronáuticos Unidos (SAU), que representa a cinco de los seis gremios del sector en la Argentina, acató la conciliación obligatoria dictada por el Gobierno nacional y suspendieron la huelga lanzada para este viernes 13, en coincidencia con el inicio de las vacaciones de invierno.
Los referentes de APLA, UALA, APTA, APA y UPSA debatieron las conveniencias y los desafíos que conllevarían no reconocer la autoridad del Ministerio de Trabajo de la Nación y resolvieron «respetar» la normativa y legislación vigente.
«Esperamos que este mecanismo de conciliación permita establece el ámbito de discusión y diálogo que nunca existió, máxime cuando se intenta interferir unilateralmente en un área tan sensible como lo es la actividad del transporte aéreo sin tener en cuenta sus implicancias en la seguridad, el impacto real en el sector, como así también en el deterioro de la vida y calidad laboral de los trabajadores», afirmaron en un comunicado de prensa.
Los sindicalistas quieren poner sobre la mesa de discusión con el Gobierno el listado completo de reclamos, principalmente, por las operaciones de las low cost y los perjuicios que provoca la política de «cielos abiertos» de Guillermo Dietrich. «Instamos a las autoridades responsables a atender esta situación con la seriedad que se requiere, haciéndolos plenamente responsables por la falta de avances y perjuicios que esta situación pudiera generar», agregaron.
El SUA, que representa a unos 15.000 trabajadores, denunció «graves incumplimientos» por parte de la autoridades gubernamentales y advirtieron que las «políticas aplicadas torna un futuro incierto para el sector» porque, según, afirmaron, «degrada la seguridad operativa poniendo en riesgo a los usuarios y trabajadores».