Sucedió en Tucumán, durante la realización del evento religioso encabezado por el arzobispo Carlos Sánchez. También participó la vicepresidenta Gabriela Michetti, una reconocida opositora a la iniciativa de interrupción del embarazo que se votará en el Senado.
Con la presencia de Gabriela Michetti, en reemplazo de Mauricio Macri, el arzobispo de Tucumán, Carlos Sánchez, encabezó el Tedeum en la catedral provincial con motivo del Día de la Independencia.
A pesar de que se trata de una celebración por el 9 de Julio, el discurso de Sánchez renovó las críticas de la Iglesia católica a la legalización del aborto, que desde este martes se comenzará a discutir en el Senado.
«Respetemos este derecho fundamental que tiene todo ser humano, todo argentino. (…) Vale toda vida, no hay sobrantes en la Argentina», afirmó el religioso ante autoridades nacionales y provinciales. «El aborto es la muerte de un inocente. No nos engañemos ni dejemos engañar», agregó.
«Nadie tiene derecho a eliminar la vida de otro ser humano», sostuvo Sánchez en su homilía.
Los festejos por el 9 de Julio comenzaron temprano en la plaza Independencia con la ceremonia de izamiento de bandera y un chocolate patrio. Allí, el gobernador tucumano Juan Manzur estuvo acompañado de funcionarios del Gabinete provincial, vecinos, estudiantes y cadetes de las fuerzas de seguridad.
Luego, el titular del Ejecutivo local se dirigió junto a sus funcionarios a la Catedral para participar del Tedeum, de que también participó la vicepresidenta, quien se mostró un poco alejado del mandatario.