Los hechos ocurrieron esta madrugada en pleno centro de la capital provincial, a pocos metros de la peatonal Junín, una zona que -se supone- está custodiada por la policía durante las 24 horas.
Lejos de ser una mañana tranquila para disfrutar del feriado, los comerciantes que tienen locales en la zona más activa de la ciudad se encontraron con desagradables hechos de inseguridad. Varios negocios amanecieron con los vidrios rotos y hasta el momento nadie puede brindar demasiadas respuestas.
Los casos se distribuyeron de la siguiente manera: por Mendoza entre Junín y 9 de Julio una dietética fue vandalizada por desconocidos; también corrió la misma suerte el local de Frávega entre Mendoza y San Juan, al igual que otros dos comercios con vidrios expuestos a la vía pública.