Se trata de ocho empleados del Centro Emisor de Licencias, quienes argumentan que fueron echados arbitrariamente dado que sus nombramientos no fueron políticos o ligados a la anterior gestión.
Esta mañana un grupo de cesanteados que trabajaban en el municipio capitalino de la vecina provincia dialogó con Radio Dos y explicó su situación, solicitando su reincorporación.
Se trata de un grupo de ocho empleados que formaban parte del Centro Emisor de Licencias del municipio, desde donde manifestaron que los despidos se realizaron dado que sus nombramientos habrían sido politicos, ligados a la gestión de Ríos. Los trabajadores desmintieron esto y explicaron: «Aclaramos que el día que nos notificaron el despido nos manifestamos de forma pacífica». Añandiendo que, «nuestra jefa también fue nombrada en la gestión anterior y aún continúa”. Para colmo de males, ayer el grupo recibió una denuncia penal por supuestas agresiones, aunque las trabajadores y trabajadoras desmienten esa versión.
En cuanto a la labor que realizaron se definieron como «multifunción dado que daban los cursos, atendían al público e imprimían las licencias de conducir, entre otras actividades. También dejaron en claro la informalidad laboral con la que se manejaban, «no teníamos información si se iban renovar los contratos, seguíamos cobrando pero no teníamos ninguna documentación de que seguíamos». Algunos de los despedidos cuentan con una antigüedad de más de dos años y medio, remarcando que ingresaron por un convenio con la Unne y no por «acomodo político».
Los ocho cesanteados del Centro Emisor de Licencias que afirman percibían un salario de cercano a los 12 mil pesos, esperan ser reincorporados a sus funciones.
Nuevamente una toma de decisión cuestionable de parte de la gestión comandada por Eduardo Tassano.