Se trata de Horacio Tichellio quien se encontraba internado en Buenos Aires. El hombre falleció luego de permanecer en el centro de salud por un largo tiempo luego de una grave enfermedad. Su hijo Gabriel Tichellio, fue asesinado a golpes en la cabeza en el marco de un crimen caratulado como «pasional».
El crimen
El homicidio de Gabriel Tichellio (32), cabo 1º del Servicio Penitenciario Provincial (SPP), tiene aristas pasionales. Están detenidas su esposa y una amiga.
En allanamientos en la vivienda de la víctima y en el sector donde dejaron el vehículo con el cuerpo, incautaron el mazo (martillo utilizado en la construcción), guantes, una frazada y ropas con manchas de sangre. En la evaluación preliminar, que deberá ser respaldada por el análisis de los peritos, el suboficial habría sido asesinado en su casa. Luego, lo colocaron en un vehículo y lo llevaron a un lugar distante, donde lo abandonaron en el vehículo.
Tichellio era casado y dejó tres hijos, que tienen 9, 7 y 5 años. Se desempeñaba como albañil en la Unidad de Trabajo del SPP.
En la mañana del jueves 26, estuvo en la Jefatura del SPP, en sala de monitoreo de funciones electrónicas. Se retiró en su horario habitual de las 13.30. Pero, a la tarde no regresó a sus funciones. La preocupación comenzó a crecer cuando su familiares advirtieron la demora de regreso a su casa y su teléfono celular no respondía. Una hermana se comunicó en dos oportunidades con la Jefatura del SPP buscando novedades sobre su paradero.
Cerca de las 23 de ese jueves, alertaron a la policía de que en una camioneta Renault Kangoo había un hombre sin vida. Una patrulla de la comisaría 14ª concurrió a la avenida Maipú casi Ruta N° 12.
En la inspección ocular, los agentes advirtieron que la víctima tenía lesiones en la cabeza. Con el correr de los minutos se determinó que la víctima era un agente penitenciario.
Fuente: Corrientes Hoy