El Consejo Superior de la Universidad Nacional del Nordeste emitió en el marco de la sesión ordinaria de la fecha una declaración, en la que pone de manifiesto “la preocupación por el retraso en la definición del acuerdo paritario de los docentes universitarios”.
Esta posición del cuerpo surge en un momento en el que la instancia de negociación entre el Ministerio de Educación de la Nación y los gremios docentes están en punto muerto.
De cara a esta situación, el Consejo Superior hace un vivo reclamo de que “se privilegien las instancias de negociación y diálogo que garanticen las actividades académicas”.
La declaración deja en claro el esfuerzo que la UNNE realiza cotidianamente para mejorar la prestación del servicio educativo, “a través de una responsable administración de los recursos públicos que la sociedad nos confía”.
El siguiente es el texto completo de la Declaración del Consejo Superior de la Universidad Nacional del Nordeste:
La comunidad de la Universidad Nacional del Nordeste expresa su preocupación por el retraso en la definición del acuerdo paritario de los docentes universitarios.
Ante la adversa situación económica que atraviesa el país, es necesario que el Gobierno Nacional presente una propuesta razonable frente a la pérdida de poder adquisitivo del salario docente y no docente, que garantice el reconocimiento del trabajo y el valor de su función social. Por ello, solicitamos que se privilegien las instancias de negociación y dialogo por encima de intereses sectoriales, para garantizar el desarrollo normal de las actividades académicas y de gestión de la universidad.
Por nuestra parte, la Universidad Nacional del Nordeste realiza esfuerzos cotidianos para mejorar la prestación del servicio educativo que permite el acceso a la cultura y al conocimiento científico a cada vez más ciudadanos. Y lo hacemos a través de una responsable administración de los recursos públicos que la sociedad nos confía.
Estamos convencidos que la Universidad Pública argentina puede sostener su larga tradición de excelencia académica en sus carreras, de propuestas curriculares innovadoras y de calidad, mediante un presupuesto que permita la inversión en infraestructura acorde a las demandas formativas, el fortalecimiento de las políticas de igualdad educativa para el acceso, promoción y graduación de los estudiantes, el pago de salarios dignos a sus docentes y no docentes, el incremento de recursos para las áreas de investigación y extensión y la transparencia y eficacia en la gestión del gasto público universitario. Es imprescindible que el Estado sostenga el financiamiento necesario del sistema universitario, para garantizar el normal cumplimiento de sus funciones como bien público y social, y el derecho a la educación superior a la mayoría de nuestra sociedad.
Este año transitamos el Centenario de la Reforma Universitaria, movimiento que otorgó forma y contenido a la educación superior en Argentina. Reivindicando sus postulados y la vocación democrática de los universitarios, todos juntos tenemos una oportunidad para demostrarle a la sociedad la capacidad de acuerdo para resolver los conflictos haciendo un esfuerzo entre el Gobierno Nacional, los gremios y las Universidades, donde prime el debate racional y plural, que sirva de guía para la construcción de los consensos que necesitamos para vivir en un país más justo, libre e igualitario.
