El agresor, un joven de 24 años nacido en Baltimore, se suicidó.
Dos muertos -además del agresor- y once heridos es el balance provisional del ataque que tuvo lugar ayer en una zona comercial de la ciudad de Jacksonville, en el noreste de Florida. Son las cifras oficiales facilitadas al cierre de esta edición por Mike Williams, el sheriff de esta ciudad de 900.000 habitantes. En la última rueda de prensa dada por Williams, confirmó que cuando las fuerzas de seguridad entraron al recinto donde se celebraba el torneo, el tirador se había suicidado.
En su comparecencia ante los medios, el sheriff apuntó que el sospechoso es un hombre blanco, de 24 años, cuya identidad responde a David Katz, de Baltimore, que participaba en el campeonato y portaba un arma corta. La Policía descarta la existencia de un segundo atacante. El tiroteo se produjo durante la celebración de un torneo de videojuegos deportivos que se podía seguir en directo a través de internet. De la emisión ha trascendido un vídeo en el que se escuchan una docena de disparos y los gritos de desesperación de varias personas.
A falta de los datos definitivos, en el hospital UF Health, de Jacksonville, decían haber atendido a seis personas, de edades de entre 20 y 35 años, procedentes del lugar de los hechos. Cinco de ellas se encontraban en buenas condiciones y una de ellas en estado grave, con un disparo en el pecho. Tres había recibido un disparo, mientras los demás habían recibido al menos dos. En otro de los centros médicos de la localidad, el Memorial Hospital, las tres personas atendidas no sufrían heridas de gravedad.
Es el segundo tiroteo en Jacksonville en apenas 48 horas. El viernes, los disparos al final de la celebración de un partido de fútbol americano colegial dejó un joven muerto y dos heridos.
Fuente: ABC Internacional
Foto: El País