De mal en peor: estiman que la inflación de 2018 se encamina a ser la más alta del siglo XXI

Economia

La consultora «Ecolatina» brindó un informe, donde indicó que la inflación se encamina a mostrar la tasa más elevada desde 1991. Analistas prevén «una elevada inercia para 2019, por lo que incluso si se logra calmar el mercado cambiario, la suba de precios difícilmente baje del 30%».

La consultora económica Ecolatina, arrojó un preocupante informe que señala una inflación cercana a los 45% para este 2018, si no se materializa un nuevo salto cambiario.

Ante esta magro escenario, la consultora prevé que la inflación será la más alta del siglo XXI que dejará «una elevada inercia para 2019, por lo que incluso si se logra calmar el mercado cambiario, la suba de precios difícilmente baje del 30%».

De acuerdo a los últimos datos del Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (INDEC), la inflación trepó 3,9% en agosto, su mayor registró en lo que va del año, acumulando 24,3% en los primeros ocho meses del año y con una variación de 34,4% respecto a agosto 2017.

Sin embargo, en Ecolatina prevén que la suba de precios se acelere en septiembre producto del salto del dólar de más de 20% a fines de agosto.

Al respecto, el índice de precios de Ciudad de Buenos Aires de la consultora trepó 6,2% en la primera quincena de septiembre respecto a la primera quincena de agosto. El principal factor de la aceleración fue la disparada del dólar que se reflejó en la suba del IPC Núcleo (+6,5%), seguido por el aumento en Regulados (combustibles y tarifas) que trepó 6,3%.

«Si bien el motor-dólar continua siendo el principal impulsor de los precios, tras varios meses de inflación de por lo menos 3% mensual la inercia pasa a ocupar un rol central: precios que suben para no ceder terreno frente a otros que subieron antes. Cabe destacar que esta dinámica puede retroalimentarse en los próximos meses, a medida que los precios vayan incorporando la totalidad de los efectos del reciente salto cambiario», consideran los analistas.

En este marco, sin una reapertura de paritarias, los salarios reales caerían más de 10% en el segundo semestre del año.