Se trata de remises y ‘combis’ que prestan el servicio de traslado en Capital y alrededores, ya que la mayoría de las líneas de colectivos públicos no circulan debido al paro de trabajadores de Ersa.
Desde ayer, y en varios barrios de la Ciudad de Corrientes, volvieron las ofertas de viajes a la gente que espera en vano el recorrido de los colectivos.
Se trata de una práctica común cada vez que hay conflicto en el transporte, y automovilistas particulares aprovechan la situación para ganar algunos pesos de más.
«Algunos remiseros pasaban ofreciendo viajes por $180 hasta el centro», dijo una vecina que ayer se encontró con el paro de las unidades de Ersa. Pero lo que no sabía, de manera certera, era que dicho remis no tenía ninguna habilitación.
Lo mismo pasa con las ‘combis’ y sus choferes, que ven un momento propicio para trasladar a quienes no pueden faltar a su trabajo, lugar de estudio o acudir al médico por un turno programado con anterioridad.