La obra será emplazada en Mercedes, y su construcción ya tiene avances notorios. Todo empezó como una iniciativa de los fieles de distintas partes del país, hasta que el municipio lo materializó.
La iniciativa comenzó siendo promovida por un grupo de promeseros de distintas partes del país y luego tomó fuerza de la mano del Gobierno municipal.
Se trata de una escultura de casi ocho metros de altura, que se emplazará en la intersección de la Avenida Carlos Pellegrini y la Ruta Nacional 123, frente al cementerio de La Merced.
Hace un mes, personal del área de vivienda del municipio depositó en el predio la cruz estructural que será parte del soporte de la escultura. “La posición fue elegida de manera estratégica, para que la obra se oriente hacia la tumba de Antonio Mamerto Gil Nuñez, ubicada dentro del cementerio”, explicaron.
“La imagen tiene mas de siete metros de altura con cimientos sólidos de tres metros de profundidad. La estatua está íntegramente echa de concreto y se divide en tres partes: la primera: el torso y la cabeza del gaucho, la cual ya está concluida; la segunda consta de la cintura y la primera parte de las piernas, la cual esta en proceso; y la última, el resto de las piernas y los pies de la imagen. Esta obra de arte está a cargo del artista plástico Abel Maciel”, detallaron.
“El Gauchito es un ejemplo de solidaridad, de ayudar a los que no tienen”, destacó a época Lucas Di Salvo, un promesero del Gauchito Gil, que comenzó hace cinco años a administrar un grupo virtual de devotos (El milagroso Gauchito Gil), que se expandió hasta nuclear a unas 15 mil personas.
“Comenzamos a vincularnos en redes sociales, pero luego también nos encontramos fuera de ese espacio. Hay más de 200 personas que participan activamente de distintas acciones solidarias y tareas de ayuda al prójimo, y que parten de la fe que compartimos”, explicó Di Salvo.
Ahora, la comunidad de promeseros se prepara para viajar a Mercedes el próximo 8 de enero, con el fin de participar de la inaguración de la escultura.
En redes sociales, el principal sitio de vinculación del grupo, también promueven que en el nuevo espacio “no exista la posibilidad de lucrar con la fe de las personas”, postuló.