El intendente de la capital correntina, Eduardo Tassano, confirmó a principios de diciembre el plus de fin de año para los empleados de la comuna. Lo anunció ‘con bombos y platillos’, aunque no dijo ni una palabra sobre las promesas de campaña entre las que se encontraba un ‘Plan Hídrico’ que nunca comenzó.
Si bien el aumento extraordinario -por única vez- de $3.000 que recibirán los municipales de la Ciudad de Corrientes es una suma que beneficiará a los trabajadores, también es importante remarcar lo ausente que estuvo el Gobierno capitalino en lo que se refiere a infraestructura urbana y mejoramientos barriales.
Sin ir más lejos, los ejemplos más claros pudieron verse durante las últimas precipitaciones que afectaron al NEA y puntualmente al distrito que gobierna Tassano.
Las calles céntricas y distintos puntos de la ciudad quedaron bajo agua. Los intentos por solucionar los anegamientos fueron poco productivos y los vecinos apuntaron directamente contra el intendente de ECO+Cambiemos.
La noticia del plus hasta parece ser una distracción, con la que Tassano busca quitar del eje de discusión cuestiones de vital importancia como mejorar los servicios o llevar a cabo las obras que se cansó de repetir el año pasado antes de las elecciones.
El Plan Hídrico hasta el momento nunca se vio, ni siquiera se conocieron indicios al respecto. Tampoco se sabe nada de las tareas de limpieza, de arreglos de calles y de mantenimiento de espacios públicos.
La paciencia de la gente es cada vez menor, la confianza en el jefe comunal va en caída y así seguirá de no haber una decisión firme de cambiar el rumbo y ocuparse seriamente de las necesidades de la comunidad.