La decisión fue de la Cámara Federal de Apelaciones de Corrientes, a cargo de Victor Alonso, Selva Spessot y Mirta Sotelo de Andreau. La medida se oficializó tras la solicitud que hizo el detenido, con el objetivo de encargarse de su hijo enfermo.
El hombre había presentado un pedido de prisión domiciliaria para poder estar con su hijo, ya que el menor requiere cuidados intensivos y, además, se encontraba detenido a más de 1000 km del núcleo familiar, lo que constituye una violación a su derecho a preservar sus vínculos afectivos.
En su escrito, el condenado manifestó que solicitó la medida a los fines de poder ayudar a su familia en razón de que es el único sostén económico y que trabajará desde el domicilio.
Teniendo en cuenta el Interés Superior del Niño, los miembros del Tribunal resolvieron darle el beneficio al hombre, que será controlado bajo el sistema de monitoreo electrónico, y, hasta que se resuelvan todas las diligencias para su implementación, le ordenó a Gendarmería Nacional que elabore un informe cada 15 días de sobre el cumplimiento de la prisión domiciliaria, como así también del seguimiento y control de la situación de salud de los menores y de su padre.
Los magistrados sostuvieron que no se puede obviar la situación crítica que está atravesando la familia, donde uno de los hijos está bajo tratamiento médico oncológico y el otro se encuentra atravesando un período de crisis debido a la situación familiar. De esta manera, explicaron los camaristas, «se busca que el padre pueda asistir en su hogar al hijo menor mientras que la madre se ocupa de darle asistencia y tratamiento al primogénito».
En su escrito, el condenado manifestó que solicitó la medida a los fines de poder ayudar a su familia en razón de que es el único sostén económico y que trabajará desde el domicilio.
