Una vez más, la capital chaqueña se transformó en un inmenso piletón que acarreó serias complicaciones para los vecinos, tanto para quienes se encontraban fuera de sus hogares como para aquellos que estaban dentro de los mismos.
Es verdad que la lluvia fue intensa y constante, donde cayeron en poco más de dos horas más de 150 mm., pero nuevamente fue el intendente de Resistencia el principal apuntado por la situación, a quien le adjudican falta de mantenimiento en muchos barrios, como así también la falta de obras complementarias en las tantas calles pavimentadas.
De hecho, el pasado 3 de enero se anunció la construcción de 18 cuadras de pavimento, en una obra conjunta entre la provincia y el municipio. Sin embargo, en todo el comunicado no se hace referencia a las obras complementarias necesarias para evitar anegamientos.
Las redes sociales se transformaron en una especie de caja receptora de reclamos, donde los vecinos de la capital chaqueña expusieron sus penas por el agua.