Además se entregaron 300 carpetas a Defensa del Consumidor.
Para esto, un significativo número de perjudicados empezaron a contactarse entre sí para dar a conocer el reclamo e intentar conseguir una salida a la angustiosa situación.
«Car France», «Car Plan» y «Metz» fueron los puntos elegidos para escrachar y, según contaron, crear conciencia a la sociedad para que no se metan en estos planes «que perjudican notoriamente nuestra economía».
Así, una de las damnificadas contó que ingresó a un plan donde empezó a pagar «4600 pesos y nos aseguraron que la cuota no iba a pasar de 5000. Sin embargo, fue aumentando de a 2000 pesos y hoy estamos pagando 13000».
Estas personas claman por una solución ya que, según dijeron, su economía se complicó notoriamente y la única salida potable es deshacerse del vehículo por el que ya pagaron mucho dinero.