Ocurrió ayer en una vivienda sobre la calle Pública, entre Lisandro de la Torre y Alem. El hombre de 76 años se quitó la vida de un disparo en la cabeza. En tanto la mujer fue trasladada al hospital,con heridas en el pecho y el antebrazo izquierdo.
Este domingo cerca del mediodía, el servicio 101, recibió el llamado de una joven de 23 años quién alertó a los efectivos sobre disparos propiciado por un vecino, de 76 años, a su madrastra de 28 años.
Los vecinos manifestaron a la Policía que el anciano estaba armado con una escopeta y un revólver. Posteriormente, ingresó a una vivienda sobre la calle Pública entre Lisandro de la Torre y Alem.
La tensa situación obligó a activar un protocolo de actuaciones, como así también el plan de llama en forma urgente para detener al hombre.
Sin embargo, cuando los efectivos rodearon el lugar pudieron escuchar una detonación desde el interior de la vivienda, cercado con maderas.
La Policía procedió a rodear el inmueble, apostando al personal en la parte trasera de la vivienda y al ingresar pudieron constatar el cuerpo sin vida del anciano que estaba sentado sobre una silla y con una herida sangrante en la parte derecha de la cabeza. En el lado izquierdo, observaron un revólver con varios cartuchos.
En forma inmediata, se solicitó médico del hospital local y se procedió a realizar un cerco con personal policial a fin de resguardar el lugar del hecho.
La mujer fue derivada al hospital de Sáenz Peña con dos heridas de bala, una en su pecho y otro en el antebrazo izquierdo.