El nuevo precio rige desde hoy, con un aumento del 24 %, lo que significa un juego golpe al bolsillo de la gente.
El tubo de 10 kilogramos pasará a costar $ 267,70, antes de cargarle los impuestos. Así lo estableció la resolución 15/2019 de la Secretaría de Energía, publicada en el Boletín Oficial.
El gobierno dispuso que desde el viernes la garrafa de 10 kilos tendrá un valor de $ 160,28 para el fraccionador, de $ 240,97 para el distribuidor y de $ 267,70 para el público. Con impuestos se va a $ 296.
En la resolución, el gobierno también estableció que el monto del subsidio para los beneficiarios del Plan Hogar (destinado para la compra de garrafas en viviendas que no estén conectadas a la red de gas natural) será de $152 por garrafa.
El precio de la garrafa es determinante en los hogares que no tienen acceso a la red de gas natural domiciliaria y se encuentra regulado en el marco del acuerdo de estabilidad de precios del Gas Licuado de Petróleo desde 2008.