El Día del Animal se celebra en la Argentina todos los 29 de abril en conmemoración el fallecimiento Ignacio Lucas Albarracín, un abogado que fue el gran pionero en el país en la lucha por los derechos de los animales. El conocido ambientalista correntino dedicó unas palabras a los animales en su día.
Este día no es sólo para los animales considerados domésticos sino para la vida animal en su totalidad.
Casi todos nosotros crecimos comiendo carne, vistiendo cuero y visitando zoológicos. Muchos de nosotros compramos a nuestras amadas “mascotas” en tiendas de mascotas y mantuvimos preciosas aves en jaulas. Vestimos lana o seda, comimos hamburguesas en McDonald’s y fuimos de pesca. Nunca consideramos el impacto de estas acciones en los animales que estaban involucrados. Por la razón que sea, ahora te preguntas: ¿Por qué los animales deben tener derechos?
El principio básico de igualdad no requiere de un trato igual o idéntico, solo requiere de una consideración igual. Ésta es una diferencia importante cuando se habla de los derechos de los animales. A menudo, la gente se pregunta si los animales deben tener derechos, y la respuesta es sencilla: ¡Sí! Definitivamente los animales merecen vivir su vida sin sufrimiento y sin explotación.
Cuando se está decidiendo sobre los derechos de un ser “La pregunta no es: ¿pueden pensar?, tampoco es ¿pueden hablar?, sino ¿pueden sufrir?”. Además, Martínez reslató que la capacidad que tiene un ser de sufrir, es la característica vital que le da a ese ser el derecho a ser considerado con igualdad. La capacidad universal de sufrimiento no es solo otra característica particular, como la capacidad del lenguaje o la del saber matemáticas avanzadas; todos los animales tienen la misma capacidad de sufrir tal como el ser humano la tiene. Ellos sienten dolor, placer, miedo, frustración y soledad. En cualquier momento que consideremos hacer algo que pudiera interferir con sus necesidades, estamos obligados a tomarlos en consideración.
LEY NACIONAL 14.346
Se Establecen Penas para las Personas que Maltraten o Hagan Víctimas de Actos de Crueldad a los Animales.
Cada 10 ejemplares capturados para su venta ilegal, sólo 1 sobrevive. Y las aves representan la mitad de ese negocio fuera de la ley.
Trampas, redes y hasta armas son las formas más comunes utilizadas por los cazadores para capturar a los animales. En muchos casos, sacrifican a familias enteras y sólo se quedan con las crías. 9 de cada 10 animales capturados mueren antes de llegar a ser comercializados
Desde reptiles, mamíferos, anfibios, peces y hasta insectos, todos ellos son buscados por los cazadores. Entre aquellos animales que sí llegan a comercializarse, sólo 10 de cada 100 se recuperan, y únicamente 5 por ciento logra regresar a su hábitat
Las aves representan la mitad de la venta ilegal. Loros, tucanes, lechuzas, jilgueros y cardenales son algunas de las especies más buscadas por los cazadores para luego comercializarlas como mascotas.
Los traficantes venden a muchos de estos animales como mascotas, por eso es muy importante que seamos conscientes del daño que genera este negocio ilegal y ayudemos a prevenirlo, avisando a las autoridades correspondientes y evitando la compra de animales que no son domésticos
El tema de tráfico de fauna “debe ser considerado crimen organizado y tratado como un delito complejo para cambiar la perspectiva y que no se nos sigan yendo nuestras especies”.
Hace falta “logística de control e infraestructura para la rehabilitación de especies rescatadas”. hay que trabajar en “vínculos institucionales más sólidos, una logística de control y una ley de fauna que aborde el tema dentro de una reforma del código penal”.
Es importante resaltar que no está permitido la tenencia de animales silvestres en los hogares y mucho menos su compra o si comercialización. Muchos de los ejemplares que fueron víctimas del tráfico ilegal, y que han sido mantenidos como mascotas mucho tiempo, no se le puede regresarlos a la vida silvestre porque adquieren una dependencia muy fuerte con el ser humano. Están acostumbrados a acercarse a las personas para recibir comida y esto les impide tener conductas adecuadas para sobrevivir en la naturaleza nuevamente. En resumen les quitamos su vida a un animal.
Toda criatura que tenga el deseo de vivir, tiene el derecho de vivir sin dolor ni sufrimiento. Los derechos de los animales no son solo una filosofía— es un movimiento social que desafía a la visión tradicional de la sociedad que considera que todos los animales no humanos existen únicamente para el uso humano. “Cuando se trata de dolor, amor, alegría, soledad y miedo, una rata es un cerdo, es un perro, es un niño. Cada uno valora su vida y lucha por ella” finalizó.