El directorio de la Caja Forense del Chaco, presidida por Gustavo López, dispuso, a mediados del año 2018 una investigación interna, originada por la denuncia presentada por el personal administrativo, Walter Torres, el cual señaló irregularidades en el ámbito de la gerencia, donde acusó al titular de la gerencia Carlos Arturo Sánchez quien fuera despedido y posteriormente presentara una medida cautelar innovativa contra la misma institución.
Trascendió que el dinero faltante alcanzaría la suma de 1 millón de pesos.
Así se fueron juntando pruebas surgidas de la investigación hasta febrero de 2019, reuniéndose ocho cuerpos, de los cuales, dos eran principales y seis anexos. Se tomaron declaraciones testimoniales de algunos de los empleados de la Caja Forense específicamente el caso del señor Walter Torres y Jessica Castillo.
Diego Tolosa integra el directorio compuesto por cuatro miembros y Andrés Lozina es vicepresidente Tesorero y se presentaron como testigos en la Sala Segunda de Apelaciones de Trabajo, declarando –de alguna manera- en contra de la misma y atribuyen el despido de Arturo Sánchez, a una interna en el Consejo de Abogados.
Tolosa, a su vez trabajaría en el estudio jurídico que dirige José Sánchez, según comentan abogados de nuestro medio.
Este director, declaró que Walter Torres -quien promoviera la denuncia- según las pruebas colectadas, cobró en forma personal cheques que habían sido entregados a la Caja Forense por el pago del alquiler del local de la Calle José María Paz y que ese dinero, nunca ingresó a las cuentas bancarias de la institución. Sostiene además que se detectaron otras irregularidades, que también involucran a Torres.
Por esos motivos, el directorio en decisión unánime, despidió al agente Walter Torres. Pero Tolosa manifestó su oposición al despido de Arturo Sánchez (recordemos que Tolosa trabajaría en el estudio de su hermano José).
Andrés Mateo Lozina, también se presentó como testigo, frente a las juezas de la Sala 2ª de la Cámara de Apelaciones del Trabajo, acompañado del mismo su abogado que Tolosa, Carlos Grillo.
Expresiones homofóbicas
Lozina relató en principio que, como es vicepresidente, tiene contacto fluido con el presidente Gustavo López y con Arturo Sánchez. Que pudo observar -entre éstos- desde un principio “una relación distante y observé la quita gradual de funciones, por parte del presidente hacia el gerente, como por ejemplo todo lo que tiene que ver con el asesoramiento, en materia de finanzas e inversiones, se le quitó esta función”.
Lozina también afirmó que “en las declaraciones testimoniales de la investigación interna que determinó el despido de Sánchez, los agentes Walter Torres y Jessica Castillo, acusaron al gerente, de que se dirigía al presidente burlándose de su inclinación sexual, textualmente diciendo: «ahí viene el putito». Era un ambiente insostenible entre ellos, desde el mismo inicio de la gestión”.
Lo cierto es que el día 20 de febrero de 2019, en una reunión extraordinaria de la comisión directiva de la Caja, en la ciudad de Presidencia Roque Sáenz Peña, se tomó la decisión por mayoría simple, de 4 votos de los doctores Gustavo López, María Benito, Ángel Alvarenga y Alfredo Centurión contra 3 votos de la minoría: Diego Tolosa, Víctor Lobato y Andrés Lozina, de despedir al gerente Carlos Arturo Sánchez invocando los miembros de la mayoría un supuesto abuso de confianza, que fue resuelto ese mismo día.
“José Sánchez pone los jueces en Resistencia”
Lozina también manifestó que, por comentarios de sus colegas, tomó conocimiento que “el Dr. López y el Dr. José Sánchez, siendo de la misma agrupación gremial y más precisamente el primero ha rivalizado o conformado un grupo dentro del Consejo de Abogados que se opuso al segundo. Por ejemplo, en el apoyo brindado a un Juez de Cámara, no recuerdo el nombre, pero que inclusive generó comentarios en el grupo del Consejo. Acusaciones como «José Sánchez pone los jueces en Resistencia´, vuelvo a reiterar todo en virtud de comentarios recibidos”.
Fuente: infoqom.com
