El gobernador de Corrientes, Gustavo Valdés, se reunió con posibles inversores durante su viaje por el continente asiático. Lo que todavía no se sabe con seguridad es la situación de dichos empresarios, y ante una información como esta vuelve a sobrevolar el fantasma del frigorífico Tomás Arias, donde los encargados de recuperarlo son dos chinos flojos de papeles.
Cabe recordar que el mandatario provincial viajó junto a una comitiva con el objetivo de conseguir inversores o empresarios dispuestos a desarrollar actividades en suelo correntino. Al menos eso es lo que se reveló de manera oficial.
Teniendo en cuenta lo anterior, Valdés comentó detalles de su agenda en China: «Comenzamos el día en Dalian, en la provincia de Liaoning, donde fuimos recibidos por Li Pengyu -director del Comité de la Nueva Área de Jinpu- la zona de la ciudad donde están instalados sus parques industriales», dijo el gobernador en referencia a lo que hizo ayer.
Asimismo, adelantó que «acordamos una cooperación conjunta mediante un viaje de empresarios chinos a Corrientes para conocer nuestras fortalezas productivas del sector ganadero y forestal».
En ese sentido, es pertinente mencionar que ya hubo un episodio con protagonistas chinos del que también fue parte Valdés. El frigorífico Tomás Arias de Riachuelo debía ser puesto en funciones por dos ‘prometedores empresarios’ que sedujeron al gobernador, pero ambos quedaron bajo la lupa de la AFIP por inconsistencias en las documentaciones presentadas a la entidad: deudas, beneficio de asignaciones familiares, patrimonio escaso para el desarrollo de un gran emprendimiento y hasta el rótulo de morosos incobrables.
Tal vez no sea éste un caso similar al de la industria cárnica, pero nunca está de más tener al alcance los antecedentes que se relacionan con la llegada de extranjeros interesados en la provincia y sus recursos.
