«Ha venido a un buen lugar, a encontrarse con el Señor. Dios transforma el corazón y provoca la libertad», sostuvo el religioso sobre la visita del mandatario nacional a la provincia del norte.
En ese tono hizo extensivo el mensaje al resto de las autoridades políticas presentes en el acto, entre quienes también estaban el candidato a vicepresidente y gobernador salteño Juan Manuel Urtubey y otros candidatos para los comicios provinciales que se realizarán el 10 de noviembre.
«Esto que digo vale para todos y para todo lo que se juega en el mundo de la política. Los pobres no son una molestia. Son una oportunidad. Los pobres son maestros que nos enseñan», afirmó el arzobispo. En esa línea, le pidió a la dirigencia política no creer que «la historia debe hacerse desde la pelea» sino «construir juntos una nueva sociedad».
«Ayer, cuando veía los mineros,veía a gente humilde. Trabaja en La Puna. Han venido caminando con 15 grados bajo cero. Trabajan en esa situación. Es gente que trabaja horas y horas en situaciones de inclemencia para darle riqueza a la república», aseguró.
Respecto del caso de los mineros, que peregrinaron hasta Salta, dijo: «Ellos vienen juntos, el dueño de la mina, el gerente y el último de los mineros. Y provocan una nueva sociedad. ¿No es posible venir juntos caminando por la historia? ¿Por qué creemos que la historia tiene que hacerse desde la pelea?», reflexionó.
Finalmente, volvió a dirigirse al jefe de Estado y afirmó:«Mauricio has hablado de la pobreza, llevate el rosto de los pobres. Son dignos, son argentinos y son respetuosos. Merece que nos pongamos de rodillas delante de ellos».