El operativo, que se realiza todos los años, fue llevado a cabo por un equipo conformado por 20 personas que quitaron las monedas de distintos lugares del mundo. Las mismas quedan en el río luego de ser tiradas por turistas que visitan la Garganta del Diablo.
Las acciones, ejecutadas durante la jornada del lunes, estuvieron a cargo de guardaparques, guías de turismo y empleados de la empresa Iguazú Argentina, concesionaria de los servicios en el Parque.
El intendente del Parque Nacional Iguazú, Sergio Valdecantos, explicó que la tarea de limpieza se realizó aprovechando que los lunes suele producirse una merma en el caudal del río porque durante los fines de semana a las centrales hidroeléctricas ubicadas en Brasil les cierran las compuertas con el objetivo de retener agua para generar energía.
“Son dos los lugares más críticos: uno que está muy cerca de la Garganta del Diablo y otro a unos 200 metros antes de llegar al balcón. Este año nos sorprendió la cantidad [de monedas], porque el año pasado habíamos juntado menos de la mitad”, detalló Valdecantos.
Los turistas suelen arrojar las monedas después de pedir tres deseos. “Muchas veces algunos turistas ven esa acción y la imitan, o [tiran una moneda] porque ven el lecho del río tapizado de esos elementos metálicos”, agregó el intendente del Parque.
“Hoy estamos realizando el proceso de limpieza y clasificación de las monedas. En principio hallamos algunas de Brasil, de Paraguay, de Colombia, de Bolivia y de la Argentina, pero recién empezamos con esa tarea y la limpieza. La intención es donar todo a algún merendero o entidad de beneficencia”, afirmó Valdecantos.