Estiman que hay casi 400 mil empresas (en su mayoría pymes) al borde de la desaparición por su volumen de deudas con la AFIP.
El nuevo gobierno que asumirá el próximo 10 de diciembre tiene previsto enviar un ambicioso proyecto al Congreso sobre moratoria impositiva y previsional, que incluirá una quita de la deuda que se mantenga con la AFIP y un importante plan de pagos.
Este proyecto formará parte de la iniciativa del Pacto Social que lanzará Alberto Fernández el mismo día de asumir, por lo cual se buscará que el Congreso apruebe la medida en las sesiones extraordinarias que el próximo presidente convocará una vez que asuma.
Según los asesores del nuevo Gobierno, se trataría de una de las moratorias de mayor alcance en décadas, y obedecería a un reclamo tanto de la industria, especialmente las pequeñas y medianas empresas, y los sindicatos. La iniciativa formaría parte del paquete que se discute para que ambos sectores aceleren las negociaciones para firmar lo más rápido posible el acuerdo social, como primer elemento para comenzar con la reducción de la inflación y la reactivación económica.
Además, este paquete se complementa, tal como adelantó el portal Ámbito, con la apertura por primera vez en décadas, de las negociaciones para la firma de nuevas convenciones colectivas de trabajo en rubros y sectores que vayan negociando acuerdos puntuales entre empresarios y trabajadores.
Moratoria impositiva
En el caso de la moratoria impositiva, desde el albertismo justifican la medida con un dato demoledor: según la información que manejan en los equipos económicos del próximo jefe de Estado, habría aproximadamente 400.000 empresas (la mayoría pymes) con serios incumplimientos tributarios ante el organismo recaudador; las que, en muchos casos, están al borde de las inhibiciones bancarias en cuanto la AFIP levante la suspensión que rige hasta diciembre.
También los asesores indicaron que la mayoría de esas empresas, estaría en condiciones económicas y comerciales de crisis terminal, con lo que tampoco tendrían la posibilidad de poder cumplir con la deuda acumulada ante el fisco.
Desde el próximo Gobierno critican la actitud del titular de la AFIP, Leandro Cuccioli, por su conducción impositiva quien en lugar de asistir a las empresas en crisis, presionó aún más a los contribuyentes morosos para que estos desistieran de financierase con el no pago de impuestos, ante el aumento de tasas de interés bancarias y el ritmo acelerado de las Leliq.
La propuesta que se elabora, es la de proponerles a los contribuyentes que estén en plena morosidad y que puedan mostrar los problemas de complimiento que sufrieron desde la crisis del 2018; que puedan acceder a una quita en el volumen del pasivo y un plan de pagos de “largo plazo y con tasas razonables”. “La mayoría son pequeños y medianos contribuyentes que se cayeron con la crisis, y que no tienen ninguna posibilidad de acceso al crédito ni de pagar sus deudas”, aseguran desde el albertismo para justificar la medida.
En el caso de la moratoria previsional, se trata de un pedido hecho específicamente de parte de la CGT, como condición para sumarse al acuerdo social que propone el próximo gobierno de Alberto Fernández. La intención es presentar un proyecto de ley que incluya un amplio llamado al blanqueo de empleados no registrados, al menos desde el estallido de la crisis; sumado, en el caso de las pymes, a una rebaja en las contribuciones patronales y aportes durante un período determinado de tiempo.
Fuente: Ámbito
