Tres personas que presentaban síntomas sospechosos de coronavirus fueron los primeros detenidos por violar la cuarentena anoche en Santiago del Estero, informaron fuentes de la Secretaría de Seguridad de la provincia.
Uno de los apresados en la vía pública de la capital santiagueña que debía cumplir la cuarentena es un hombre de 66 años que había llegado a la Argentina en un vuelo desde España el día 2 de marzo pasado.
El otro caso involucra a dos chaqueños que viajaban en automóvil procedentes desde su provincia y fueron interceptados en un control policial caminero en Santiago del Estero, donde uno de ellos que tenía colocado un barbijo reconoció que sufría fiebre alta y dolores en el cuerpo.
La cuarentena preventiva es obligatoria para todos los viajeros -sean argentinos o turistas extranjeros- que ingresen al país procedentes de alguno de los países con alta circulación del coronavirus. Eso abarca a toda Europa -no sólo a Italia, Alemania, España y Francia-, China, Japón, Corea del Sur; Irán y Estados Unidos. Esta lista podría ampliarse con el correr de los días.
Quienes no cumplan con la misma, se enfrentan a duras penas que están previstas en los artículos artículos 205, 239 y concordantes del Código Penal para aquellos que propaguen una enfermedad peligrosa y contagiosa.
“Será reprimido con prisión de seis meses a dos años, el que violare las medidas adoptadas por las autoridades competentes, para impedir la introducción o propagación de una epidemia”, prevé el artículo 205 del código en cuestión. El artículo 239, además, sostiene que será reprimido con prisión «de quince días a un año, el que resistiere o desobedeciere a un funcionario público en el ejercicio legítimo de sus funciones».
En las últimas horas, un profesor universitario de 61 años se convirtió en la segunda víctima mortal en Argentina que registró hasta ahora 34 casos confirmados de coronavirus, una pandemia declarada por la Organización Mundial de la Salud (OMS) iniciada en China con casi 5.000 casos letales y epicentro en Europa.
Fuente: Clarín.