El gobernador del Chaco brindó una conferencia de prensa donde detalló lo que fue la reunión que los gobernadores mantuvieron con el presidente Alberto Fernández y el ministro de Hacienda, Martín Guzmán. En esa línea, adelantó que respaldará la propuesta de posponer el pago de la deuda por tres años, y anunció que la provincia también pedirá reestructurar su deuda.
Jorge Capitanich dio precisiones de la reunión que mantuvo con el presidente en Capital Federal, donde explicó en grandes rasgos lo que fue la «cocina» de la propuesta que Nación hizo a acreedores.
El mandatario informó que el stock de deuda del Chaco asciende a 40.633 millones de pesos. Con los servicios de intereses de deuda y los vencimientos a corto plazo, implican cerca de 60 mil millones de pesos. “Para la provincia del Chaco pagar 60 mil millones de pesos en concepto de intereses de deuda es un peso extremadamente elevado en su presupuesto”, afirmó.
De ese monto por intereses y vencimientos, 23 mil millones son deudas renegociadas por la gestión anterior respecto a Cammesa y el Fondo de Garantía de Sustentabilidad. “Tenemos dos objeciones a esto: primero, los usurarios intereses de deudas cobrados por Cammesa (3 mil millones de pesos). Y segundo, sobre el Fondo, que en definitiva es un financiamiento que tiene el Estado nacional con las provincias argentinas”, avisó el jefe del Ejecutivo.
Capitanich explicó que la provincia tiene que concentrar esos 23 mil millones de pesos en un proceso de reestructuración que también debe ser simétrico al que establece el Estado nacional, el cual pretende establecer los servicios de repago de un modo razonable a partir del año 2023. “Nosotros creemos que es absolutamente imprescindible hacerlo”, reconoció.
“Hemos hecho un esfuerzo extraordinario para tener superávit fiscal primario y financiero en el primer trimestre, pero la caída de los recursos es muy significativa. Lo que advertimos es que no podemos pagar los servicios de deuda e intereses con esta enorme caída de recaudación”, explicó.
En este sentido, el mandatario valoró el esfuerzo extraordinario del Gobierno nacional, en las figuras del presidente y el ministro de Economía, de establecer un mecanismo de compensación de 120 mil millones de pesos de transferencia a las provincias argentinas como aportes del Tesoro Nacional en el primer semestre, así como los recursos adicionales de organismos multilaterales de crédito para afrontar los efectos de la pandemia. Aunque consideró que eso “se torna insuficiente con la caída de la actividad económica, que implica fuerte reducción de recursos y un nivel abrupto de austeridad fiscal”.
“Veníamos con una estrategia de desendeudamiento fuerte desde el 2003 hasta el 2015, y luego se inició un ciclo de sobreendeudamiento que ha sido catastrófico para la Argentina, responsabilidad absoluta del gobierno de Mauricio Macri. Así que vamos a acompañar de una manera muy clara y contundente al presidente Alberto Fernández y al Ministro de Economía para que la reestructuración en los próximos 20 días sea exitosa”, manifestó el gobernador.
«Necesitamos estrechar vínculos para construir un gran pacto social, con un modelo de país para de este modo superar las restricciones históricas».
«El presidente expuso su proyecto y pidió apoyo; y es un hecho que el presidente tendrá todo el apoyo para trabajar para levantar al país». Detalló, por otra parte que de llegar a un acuerdo con acreedores, significará para el país «un ahorro por mas de 3 mil millones de dólares.»
Finalmente dijo: «Trabajamos con el jefe de Gabinetes Santiago Cafiero para regular la apertura de locales de pago como Rapipago o PagoFácil entre otras oficinas recaudadoras, donde Cafiero nos anticipó que este viernes podría tener una respuesta favorable».
Respecto a los casos de Coronavirus, el gobernador detalló que la tasa de contagio es del 8%, pero que la tasa de duplicación está por debajo de lo esperado, resaltando una vez más la importancia de la cuarentena obligatoria.
En esa línea, hizo mención a las tareas de la fuerza pública para mantener el aislamiento, donde manifestó que «Analizamos reemplazar la alarma sanitaria con un alerta en las lineas de celulares».