La situación generada por el coronavirus golpea de lleno a todos los sectores de la sociedad. Uno de ellos es el de los comercios que se dedican a la venta mayorista de alimentos y demás insumos de consumo cotidiano.
Entre los problemas que afectan al sector por estos días se encuentran la caída de ventas porque la gente opta por las compras digitales o los almacenes y autoservicios de proximidad; pero también los precios con los que llegan los productos por parte de proveedores.
En otro orden de inconvenientes denuncian falta de stock, innumerables controles por parte del Gobierno y dificultad para seguir operando.
“Antes de que se decrete la cuarentena las ventas se cuadruplicaron. Los consumidores venían para stockearse. En la segunda semana de cuarentena el escenario cambió y comenzó a haber problemas de logística, lo que generó falta de stock”, indicó Alberto Guida, presidente de la Cámara Argentina de Distribuidores y Autoservicios Mayoristas (CADAM). Según explicó el especialista las mayores complicaciones en cuanto a abastecimiento se dan en el interior del país por problemas de logística.
Las ventas en los comercios de cercanía crecieron un 16,6 %, según datos de Focus Market vía scanntech. Los rubros que más ventas registraron fueron los de higiene tanto personal como del hogar (17,7% y 20,7% respectivamente, según datos de la consultora Focus Market). Otro dato que arroja este mes de cuarentena es un alto crecimiento en los sitios webs de los supermercados. “La demanda era del 7%, ahora estamos superando el 40%”, explicó al respecto una fuente de Coto.
“Lo que más nos preocupa, no es solo la caída de las ventas, sino el control de los precios máximos”, sostuvo Guida. Es que a partir del 13 de marzo el Gobierno, a través de una resolución, dispuso retrotraer los precios al 6 de marzo. “Los valores de referencia son los que los supermercados informamos al programa Precios Claros, lo cierto es que en lo que respecta a mayorista sólo entre 7 u 8 cadenas brindan esa información”, explicó.
“Los controles de la AFIP generaron una verdadera debacle, porque toman ciertos valores de referencia y controlan con la misma vara a los comercios de cercanía, los grandes supermercados y las cadenas mayoristas”. “Hay muchas clausuras y eso se debe a que las cadenas informaron ofertas que hoy no tienen vigentes, porque cambian semanalmente o mensualmente”, agregó.
Desde el canal mayorista están preocupados por la nueva resolución que prolonga la vigencia de los precios máximos por 30 días más. “Los proveedores están trayendo sus productos con aumentos, sino podemos subir los precios, el escenario se nos complica aún más”, detalló Guida. En la cámara aseguran que si la situación no cambia habrá aumento de precios, desabastecimiento y más clausuras.
“Le mandamos un petitorio sobre nuestra situación compleja a la Secretaria de Comercio, pero no obtuvimos respuesta. Es complejo el futuro, pronosticamos muchos cierres de comercios sobre todo en el interior del país”, concluyó Guida.
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Fuente: ámbito.