El gobernador Jorge Capitanich inauguró el Memorial por la Masacre de Napalpí, a 96 años del trágico hecho en el que fueron asesinadas más de 200 mujeres, hombres, niñas y niños pertenecientes a pueblos originarios. El acto fue realizado en el Lote 39 de Colonia Aborigen, sitio original donde ocurrió la matanza.
“No es solamente reivindicando el pasado como hacemos un acto de justicia sino comprometiéndonos con el presente para construir un futuro. Nuestras comunidades originarias no solamente se lo merecen, se lo merece nuestra comunidad chaqueña por ser multicultural, plurilingüe, multirreligiosa, por formar parte de una sociedad humana, democrática y civilizada”, expresó el mandatario.
Capitanich estuvo acompañado por el director de Tierras del Instituto Nacional de Asuntos Indígenas, Juan Chico, por la presidenta del Instituto de Cultura, Mariela Quirós, por el ministro de Infraestructura Juan Manuel Carreras, por el intendente de Machagai Juan Manuel García y por el presidente de la Asociación Civil Colonia Aborigen, Víctor Moreno, junto a referentes y personas pertenecientes a diversas etnias.
“Que este monumento, sea el principio para recordar y construir un futuro con todos nuestros hermanos y hermanas de las comunidades originarias”, expresó el mandatario, y aseguró que la reivindicación de la memoria “es parte de una identidad democrática, pluralista, que promueve la interculturalidad”, amplió. Además hizo un llamado a la ciudadanía chaqueña: “Debemos entender que las luchas y las reivindicaciones de las comunidades originarias constituyen la esencia de nuestra misma identidad”, valoró.
El mandatario agradeció el trabajo que realizaron desde la Fundación Napalpí, y al arquitecto, oriundo del lugar, Alejandro Fernández por crear la obra que reivindica la lucha de las comunidades originarias. El gobierno chaqueño, reafirmó su compromiso en la reparación histórica a los pueblos originarios como política de estado.
El memorial se realizó en un trabajo conjunto entre el Instituto de Cultura, la Fundación Napalpí y el Ministerio de Infraestructura, a fin de restituir, -en la primera etapa de la obra-, los restos de 9 referentes indígenas de la comunidad Qom, fallecidos en la mal llamada “Campaña del Desierto”. La obra, iniciada en marzo, está ubicada en el sitio original donde ocurrió la masacre.
La obra tiene por objetivo “devolver“ a estos referentes a su territorio y generar un espacio de visibilización y de memoria de la lucha de los pueblos indígenas en la defensa de su territorio. La décima fosa de este memorial está destinada a homenajear a los chaqueños de las comunidades indígenas caídos en Malvinas. “Es importante entender que este espacio está reservado para aquellos 14 heroicos referentes que dejaron sus vidas en Malvinas y merecen una reivindicación”.
Valorar las enseñanzas indígenas
“Las comunidades originarias nos han enseñado el principio de la interculturalidad, es decir el diálogo entre culturas y no el avasallamiento de cultura por otra, sino la convivencia pacífica en coexistencia, el respeto a la biodiversidad y la preservación del ambiente”, aseguró el mandatario.
Tras destacar estos valores, destacó las políticas de reivindicación en materia de infraestructura sanitaria, educación intercultural bilingüe, viviendas, acceso al empleo que “forman parte del desafío de políticas públicas con nuestras comunidades originarias”.
Destacando la importancia de las comunidades originarias en el Chaco, que representan el 2,1% de la población en el país y 5% en la provincia, Capitanich también recordó que en este año se conmemora un nuevo aniversario del reconocimiento de la lengua qom, moqoit y wichí como lenguas del territorio chaqueño. En esta línea, anunció que en 2023, Colonia Aborigen será declarada como municipio autónomo, con elección de representantes con prioridad de pueblos originarios.
Capitanich reivindicó el pedido de perdón
“Tenemos que entender que el 19 de julio de 1924, hace 96 años se constituyó claramente una masacre y este memorial debe formar parte de un escenario a partir de la que la comunidad chaqueña sienta que ha sido un crimen de lesa humanidad y que es necesario reivindicar el pedido de perdón a nuestras comunidades originarias” agregó Capitanich. Asimismo, recordó el pedido de perdón que realizó el Estado Provincial el 16 de enero del año 2008, por la masacre de Napalpí, como acción reparadora que quedó en la memoria de los pueblos indígenas y en la historia chaqueña, luego de 84 años.
“Que el perdón de nuestras comunidades originarias, en la persona de Doña Melitona Enrique en 2008, definitivamente sea sea parte de la lucha por la reivindicación de los derechos ancestrales e históricos de nuestras comunidades”, expresó el mandatario.
Juan Chico: “Memoria, verdad, justicia y soberanía”
El director de tierras del Instituto Nacional de Asuntos Indígenas (INAI) Juan Chico remarcó la jornada como histórica, ya que después de 130 años de estar en el Museo de Ciencias Naturales de La Plata, nueve mártires de los pueblos originarios vuelven a su tierra natal. “Cerramos parte de nuestra historia dolorosa y aportamos a la construcción de la identidad de nuestro Chaco”, expresó.
Recordó que las víctimas de Napalpí fueron asesinadas en un contexto de mucho racismo discriminación y violencia, por lo que hechos como este son importantes para las comunidades, y destacó el pedido de perdón realizado por el gobernador en 2008, como “un antes y un después”.
Los restos fueron retirados del museo de La Plata y de ahí tuvieron un largo recorrido hasta llegar a su lugar de descanso. Primero estuvieron al resguardo en la casa del Chaco –hasta el 10 de diciembre 2018–, después llegaron a Resistencia con el compromiso de la construcción del memorial, que se demoró de debido a cuestiones políticas y económicas, pero fue reactivado en diciembre pasado.
“Hoy descansan en paz y eso nos emociona mucho”, expresó, pero aseguró que desde la fundación Napalpí y en conjunto con las comunidades se seguirá trabajando por memoria verdad, justicia y soberanía.
El artista Alexandro Fernández, perteneciente a la comunidad Qom, aseguró que la obra permitirá visibilizar hechos que sufrieron pueblos indígenas. “Fuimos víctimas de un proceso de genocidio, pero hoy las nuevas formas de resistencia son evitar el silencio y el olvido y este cenotafio es un ejemplo de eso”, expresó. Además, consideró que el memorial es un mensaje y una señal de alerta para las presentes y futuras generaciones para que así los hechos no queden en el olvido. “Es el símbolo de nuestra lucha ancestral”, culminó.
Quirós: Reconstruir en la memoria
La presidenta del Instituto de Cultura, Mariela Quirós manifestó el orgullo que le genera ser parte de un acto de estas características, que comenzó en 2008. “Es una continuidad en políticas públicas que tienen que ver con los preceptos de memoria, verdad y justicia”, expresó. “Es importante poder hacer pie en cada una de estas fechas para que el pueblo pueda reconstruirse en su memoria, pueda pensarse, por un pueblo sin memoria es un pueblo sin futuro”, remarcó.